Para el jefe de la escudería Alfa Romeo Racing la paralización de actividades en la Fórmula 1 representa un peligro de cierre definitivo para los equipos de bajo presupuesto porque mientras no inicie la temporada no van a recibir el dinero de los premios que alcanzaron el año pasado y eso significa que van a seguir arrastrando deudas. Cree que tanto Williams como su propio equipo son los que corren más riesgos.
En entrevista concedida al medio francés Canal+, Vasseur manifestó que no quería sonar pesimista, pero el impacto negativo que tendrá la economía mundial a causa del COVID-19 complicará a la Fórmula 1 más allá de posponer o cancelar algunas carreras y cerrar las fábricas. Si la crisis se acentúa y se siguen suspendiendo fechas llegará un momento en que ciertos equipos estarán al borde de la quiebra financiera porque realizar media temporada no les resultará rentable puesto que sus posibilidades de sumar puntos también se van a reducir a la mitad.
Considera que esta es la peor crisis que ha atravesado la Fórmula 1 desde su creación y además ocurre cuando se encaminaba a introducir nuevas reglas en el 2021 y para discutir el nuevo Pacto de la Concordia, así que no solamente el retraso es en el calendario sino también en otros aspectos. Existe un antecedente muy reciente, la crisis financiera global del 2008, cuya repercusión en la Fórmula 1 derivó en la retirada de BMW, Honda, Toyota y Renault, así que se debe estar preparados para afrontar lo que ha de venir.
En tal sentido, Vasseur hace un llamado a los organizadores y autoridades para que tomen medidas de emergencia porque los equipos de menor presupuesto no pueden esperar lapsos de tres o cuatro meses para saber qué va a pasar con esta temporada. Entiende que el COVID-19 ha sido un grave e inesperado contratiempo, pero en el 2008 no se tomaron las medidas a tiempo y el resultado fue que escuderías oficiales se rindieron y fueron reemplazadas por equipos de bajo presupuesto que luego desaparecieron.
Alertó que si bien el calendario puede contemplar hasta 18 fechas en 6 meses, eso no será igual que realizar ese mismo número de carreras en 9 meses ya que el mayor esfuerzo en el menor tiempo se traduce en emplear más personal tanto en la sede de los equipos como en las pistas. Además se deben fabricar un mayor número de piezas de repuesto, considerando que un alerón delantero tarda más de un mes en ser construido, tendrán mucha suerte si no se rompen varios en carreras consecutivas porque tal vez no puedan reponerlos a tiempo.
En palabras de Frédéric Vasseur
Financieramente, la crisis afectará a los equipos de una manera increíblemente difícil. Es hora de reaccionar. Pueden haber deserciones de equipos este año, todos deben darse cuenta de que estamos en el mismo barco, algunos están en el timón, otros están remando, los grandes equipos no siempre se han dado cuenta de eso. No se tiene que esperar tres meses para tomar decisiones que deben tomarse de inmediato, porque de lo contrario no habrá supervivencia para muchos equipos. Es la verdad del sistema.
Vía | Nextgen Auto