Corría prácticamente la una del mediodía de este martes 24 de octubre cuando un intenso olor a quemado invadió tanto la zona de pit-lane como la del paddock del Circuito Ricardo Tormo de Valencia. El Campeonato del Mundo de Fórmula E acababa de echar a rodar en su importante décima temporada y mientras que algunos pilotos titulares como Stooffel Vandoorne habían seguido la acción desde las pantallas ya que la matinal en su unidad de DS Penske había quedado en manos del rookie, Robert Shwartzman.
Apenas unas horas de test dejaron paso al susto de la jornada, cuando una de las baterías que se encontraban en el box reservado al suministrador de baterías oficial del campeonato, Williams Advanced Engineering, sufrió lo que al parecer fue una fuga térmica provocando un pequeño fuego que fue rápidamente extinguido (apenas 10 minutos estaba controlada la situación y sin haber precisado todavía de la llegada de las dotaciones de bomberos), acompañado de una escandalosa nube de humo negro.
Tal y como informó la propia Federación Internacional y la Fórmula E (replicaron comunicados), una persona se había visto afectada en el incidente, aunque sin problemas graves fue dada de alta esa misma tarde del martes. Después de una rápida evacuación, en la que toda la prensa desplazada a Cheste, invitados e incluso los propios equipos nos desplazamos al punto seguro previamente indicado (incluidos los pilotos, los cuales en muchos casos todavía portaban sus respectivos cascos y Hans), se nos mantuvo a la espera hasta que unas dos horas después se confirmó que no podíamos volver a acceder al recinto y que la sesión de pruebas se daba por terminada durante ese día.
La información ha ido llegando puntualmente desde entonces por parte de la organización de la Fórmula E, confirmando en un primer momento que el plan inicial pasaba por reanudar hoy la actividad, una situación que evidentemente ha ido evolucionando a medida que han ido viéndose los desperfectos y que se ha valorado de forma conjunta entre el campeonato y la FIA el proceder. Esto ha llevado a que finalmente se decidiera cancelar la sesión de test también programada para este miércoles 25 de octubre, no permitiendo el acceso a la prensa al complejo durante la mañana y esperando nuevas instrucciones de cara a la tarde. En principio se espera que se reconfigure el resto de la semana, con la supresión el jueves del Media Day y la decisión de llevar a cabo tanto mañana como el viernes dos sesiones completas de pruebas.
Sea como fuere, se trata de uno de los momentos clave de la temporada de la Fórmula E, los primeros test conjuntos del año y con la fecha de debut a la vuelta de la esquina como quien dice, a mediados del mes de enero en el ePrix que se celebrará en el Autódromo Hermanos Rodríguez de México. Aunque en los neumáticos no ha habido variaciones tal y como nos confirmaba ayer Stoffel Vandoorne, así como en la parte de chasis y aerodinámica, prácticamente todos los equipos traen evoluciones en materia de gestión, electrónica, software y otros apartados, además de que estaba previsto hacer dos simulacros de carrera y poner de paso a prueba el nuevo sistema de Fast Charging o de Attack Charge.
A la espera de confirmar los motivos del incidente:
En cuanto a los motivos que llevaron a producir el incendio en la unidad afectada, según hemos podido conocer desde Diariomotor, no se encontraba en proceso de carga, incluso no tiene nada que ver con los nuevos procedimientos relacionadas con el Attack Charge. Se trataba de una batería que ya había sido reparada en el pasado y que en principio se encontraba en un proceso de análisis cuando ocurrió el incidente.
En este punto, la FIA ha pedido colaboración a los equipos, los cuales en principio iban a tener acceso durante esta mañana para poder descargarse los datos de la batería y poder enviarlos para su verificación y ayuda en el esclarecimiento de dicho percance. WAE también revisará el estado de todas las baterías de los monoplazas desplazados para estos test. Queda por tanto esclarecer cuáles son los motivos que han llevado a este fallo, aunque en principio, la situación de la unidad afectada parece estar claramente definida.
A las baterías de estos coches se les exige mucho más que a las de otros coches eléctricos. Tienen piezas de prototipo y eso hace que no siempre todo esté bajo control. Hay que tomar algún riesgo para conseguir estos rendimientos, y por ellos pueden aparecer casos como este. No parece que haya sido un problema crítico, parece controlado y que puede solventarse en poco tiempo – Thomas Chevaucher
An update ahead of tomorrow’s testing sessions. pic.twitter.com/a2LGyuyK5i
— ABB FIA Formula E World Championship (@FIAFormulaE) October 24, 2023
Fotos | Fórmula E (LAT Images)
