Roman Rusinov, piloto y propietario de G-Drive Racing se pronunció hoy con respecto a la normativa extraordinaria emitida por la FIA, referente a la participación de pilotos y equipos rusos en sus campeonatos, puntualizando que no aceptará tales condiciones, mismas que considera discriminatorias, y ha decidido retirar su inscripción tanto del Campeonato Mundial de Resistencia como de la European Le Mans Series. Hasta ahora G-Drive Racing aparecía en ambas categorías bajo la bandera de la FIA, pero Rusinov prefiere desertar a tener que aceptar el no exhibir la bandera rusa o cualquier otro símbolo alusivo a ella ni poder escuchar el himno de su país en el podio.
G-Drive tenía un LMP2 en el WEC y dos en la ELMS, más una sociedad con Eurointernational para gestionar un LMP3 en la misma categoría, siendo uno de los problemas que el mismo nombre G-Drive refiere a una red de gasolineras rusas vinculadas a Gazprom, empresa sancionada a nivel internacional debido a la invasión a Ucrania. Tal como ocurrió en la Fórmula 1 con Uralkali, la FIA prohibió que empresas rusas patrocinen equipos, situación que constituye un serio tropiezo para los intereses de Rusinov. Para el piloto ruso, las medidas son arbitrarias y nada tienen que ver con el suceso deportivo sino más bien con política, de allí que le parezca injusto lo que está sucediendo.
Declaró que el pronunciamiento de la FIA es desconsiderado puesto que no toma en cuenta lo que ha hecho el equipo durante más de diez años en las principales categorías de resistencia donde han levantado la bandera rusa y escuchado el himno de su país. Según su postura, firmar el pacto que promueve el ente federativo le parece un deshonor, una afrenta para con sus paisanos que le han apoyado tanto dentro como fuera del equipo. Lo lamenta por los pilotos involucrados en el programa y a todos los miembros de G-Drive de nacionalidad distinta a la rusa, pero deben entender que no está dispuesto a renunciar a su nacionalidad solamente para competir.
En palabras de Roman Rusinov:
Hoy, yo, el piloto del equipo ruso G-Drive Racing, me niego a aceptar las condiciones discriminatorias de la FIA. Por el bien de mis seguidores, de mis compañeros de equipo y el honor deportivo, no firmaré este documento. Mejor no participar en lo absoluto. Ahora estamos considerando varias opciones de proyectos para desarrollar el automovilismo dentro de nuestro país. Espero sinceramente que podamos volver a las carreras internacionales después de que regrese el espíritu deportivo y la igualdad de condiciones para todos los participantes.
Vía | Sportscar365