El próximo 20 de noviembre es la fecha límite para inscribirse en la próxima temporada del Campeonato Mundial de Resistencia y ante los problemas financieros que viene atravesando su equipo, Jim Glickenhaus comunicó que no tiene intenciones de competir la próxima temporada, así que dejará su aventura en la clase Hypercar hasta este punto. Glickenhaus Racing no estará en las dos últimas fechas de la presente temporada, las 6 Horas de Fuji y las 6 Horas de Bahréin, debido que no cuenta con el presupuesto necesario para afrontar la gira asiática, tendencia que se debería mantener porque tampoco han encontrado patrocinador para 2024.
De esta forma, la Scuderia Cameron Glickenhaus estacionará sus SCG 007 LMH para enfocarse en otros proyectos más rentables como fabricar coches deportivos basados en el SCG 004, cuya versión 004c participó en la clase SP-X de las 24 Horas de Nürburgring 2022. Manifestó Glickenhaus que es el momento de ser realistas con su proyecto Hypercar porque el actual WEC es muy distinto al que había cuando ingresó y para ser competitivo ahora necesitaría diseñar una versión evo de su prototipo y además fabricar dos de ellos, algo que luce improbable cuando no dispone del presupuesto para hacerlo y además no cuenta con el respaldo de algún fabricante.
Añadió que la prioridad siempre ha sido su empresa y por ello prefiere dejar de lado el WEC porque no le ve sentido en invertir una gran cantidad de recursos cuando competir a ese nivel no les ayudaría a vender sus coches comerciales debido al volumen que fabrican. Para eso es preferible regresar a los eventos de resistencia con coches GT puesto que promocionarían un producto que pueden vender. Manifestó que se retira del WEC con la frente en alto ya que su esfuerzo fue legítimo, su tercer lugar en la clase Hypercar en las 24 Horas de Le Mans de 2022 y vencer en la edición de este año a los prototipos de Porsche y de Peugeot le dejan una gran satisfacción.
En palabras de James Glickenhaus:
Para nuestra pequeña empresa, competir en el WEC simplemente no tiene sentido. Encontrar el patrocinio necesario no es realista. No participaremos, para ser competitivos necesitaríamos hacer una versión evo de nuestro coche y eso no es viable para un equipo privado. La única manera de hacerlo sería con patrocinio o si un cliente quisiera ejecutar un programa con nuestro coche.
Vía Autosport
