GP de Francia 2021: Max Verstappen le paga con su misma moneda a Lewis Hamilton y es más líder

Tocaba medir de nuevo si realmente Max Verstappen y Red Bull Racing estaban en disposición de pelear por los dos títulos mundiales y lo cierto es que el Gran Premio de Francia nos ha dejado una competición que nos ha mantenido pegados a la pantalla hasta los últimos metros, en seco y sin la lluvia que anunciaban las primeras previsiones de la semana, pero con un nuevo error estrátegico por parte de Marcedes que entregaba al líder del Mundial el tercer triunfo del año.

Todos los ojos puestos en el posible ataque anunciado por Lewis Hamilton y lejos de ver este tipo de situación, lo que realmente nos encontrábamos era el error de Max Verstappen a la llegada de la primera curva. El RB16B le daba un coletazo al holandés cuando ya se encontraba posicionando el coche para afrontar el giro de derechas, lo que llevaba al líder del Mundial al exterior y le hacía perder la posición frente al heptacampeón del Mundo de Fórmula 1.

Se planteaba una carrera completamente nueva entonces, en la que curiosamente nos encontrábamos a Fernando Alonso en una magnífica séptima plaza desde la novena de parrilla desde la que partía, mientras que Carlos Sainz aguantaba la quinta posición viendo, al igual que Checo Pérez, que los tres de delante iban a ser completamente inalcanzables. El mexicano sufría mucho con el viento y un monoplaza muy descargado aerodinámicamente, por lo que le tocaba hacer una carrera a largo plazo.

Con la temperatura en alza a partir de los 25,3 grados con los que se daba la salida, no tardaríamos en ver el graining aparecer en el compuesto medio, mientras que los pilotos de la segunda mitad de parrilla, conseguían encadenar vueltas a un ritmo constante sin que el duro se viera demasiado afectado, algo que especialmente demostraría Sebastian Vettel con una carrera en la que el alemán supo encontrar el compromiso ideal entre velocidad y durabilidad del neumático.

Forma extraña de proceder en cuanto a la estrategia tanto por Ferrari como por Mercedes. Ambos equipos lanzaban el undercut sobre los pilotos que precedían a sus segundos espadas, Valtteri Bottas y Charles Leclerc, lo que forzaba la entrada en boxes de pilotos como Verstappen y Daniel Ricciardo respectivamente, sin embargo, cuando quisieron realizar la parada de sus competidores mejor clasificados, Lewis Hamilton y Carlos Sainz, estos ya habían sacrificado su posición por el gran efecto del undercut en este circuito.

Para entonces, también Fernando Alonso se había empezado a ir hacia atrás, llegando incluso a ser amenazado por Esteban Ocon, el cual partía undécimo, tendencia que se revertía en el momento en el que el asturiano montaba el compuesto duro. El Alpine se encontraba muy cómodo con esas ruedas, mientras que para Ferrari la situación era completamente la contraria, con Charles Leclerc perdiendo competitividad rápidamente y siendo adelantado por Carlos Sainz, el cual llegó a mirar la posibilidad de seguir el camino de Ricciardo, pero que finalmente sería también presa fácil tanto de Lando Norris, Pierre Gasly como Fernando Alonso.

Con Sebastian Vettel entrando a boxes en la vuelta 38 de 53, la atención pasaba a centrarse en la lucha en la distancia entre los Mercedes y Max Verstappen, el cual era llamado desde el muro también para jugar a la contra y hacer una segunda parada para montar los neumáticos medios. Quedaban menos de 20 vueltas y el holandés no sólo tenía que dar caza y adelantar a Valtteri Bottas, sino que también tenía que hacer lo propio con Lewis Hamilton, en una situación distinta a la vista en el Circuit de Barcelona-Catalunya, en la gran lección estratégica realizada por Mercedes-AMG F1.

Con problemas de radio tanto para Verstappen como para Hamilton (la de Bono sería rápidamente sustituida por un emisor nuevo), la carrera entraba en las últimas 10 vueltas con una gran tensión, con Lewis sufriendo ya vibraciones en sus neumáticos con 23 vueltas encima y con Bottas sabedor de que iba a tener que ponerse el mono de trabajo para frenar a Max y ayudar al equipo. A todo ello se sumaba Pérez, a cuatro segundos por detrás de su compañero de equipo y con un juego de duros mucho más joven que el de los dos pilotos de la firma de la estrella.

Y Bottas volvió a defraudar al equipo Mercedes. No sólo no pudo contener apenas vueltas a Max detrás, sino que un error en la chicane de Mistral al irse largo le abría completamente la puerta a Verstappen, dejándole aire libre a Verstappen para que pudiera dar algo de descanso a sus gomas (ya mostrando sus primeras flaquezas) y terminara de recortar los cuatro segundos entre ambos. Lo conseguiría, en la penúltima vuelta del Gran Premio de Francia, con Hamilton sin poder hacer nada para frenar al de Red Bull que había sabido no dinamitar los neumáticos sabiendo que tenía ritmo y distancia para darle caza.

También Checo Pérez conseguiría adelantar a Valtteri, mientras que el finlandés reprochaba por radio que no le habían hecho caso a la hora de hacer una segunda parada, por lo que el golpe de Red Bull sobre Mercedes era importante por tercer Gran Premio consecutivo. La acción del mexicano sobre el nórdico sería investigada porque Checo se fue ligeramente fuera de pista en el adelantamiento, pero finalmente no habría cambios.

Los McLaren se quedaban con la quinta y la sexta posición, mientras que Pierre Gasly contenía a Fernando Alonso y junto a Daniel Ricciardo llegaban en un grupo separado por apenas dos segundos y medio. El asturiano conseguía reponerse y terminar en los puntos en una prueba en las que se les veía por momentos fuera de juego. Sebastian Vettel y Lance Stroll se llevaban las últimas plazas con derecho a puntos, con los dos Ferrari fuera de los puntos y con las grandísimas actuaciones de Yuki Tsunoda y George Russell que terminaban 13º y 12º de la general. Con todo ello, Verstappen es más líder, con 131 puntos por los 119 de Hamilton y los 83 de Pérez. En constructores la cosa es más dramática con los 215 de Red Bull por los 178 de Mercedes-AMG F1.

Clasificación Final – GP de Francia 2021