El Gran Premio de Abu Dhabi llegará en 2018 a su décima edición en la Fórmula 1, manteniendo su posición habitual de cita final de la temporada que ha mantenido siempre excepto las ediciones de 2011, 2012 y 2013. La primera vez que la categoría reina compitió allí fue en 2009, como la última carrera de una temporada singular con victoria de Sebastian Vettel. Con el título decidido en favor de Brawn GP y Jenson Button, el primer Gran Premio de Abu Dhabi llegó sin tantas emociones como se esperaban pero a pesar de ello, la carrera tuvo multitud de elementos interesantes a los que prestar atención, en un año que marcó el devenir con el último gran éxodo de equipos oficiales. Fue también la última vez que Fernando Alonso usó un motor Renault antes de la temporada 2018.
El Gran Premio de Brasil, dos semanas antes, había coronado a Jenson Button como campeón del mundo de 2009, mientras Rubens Barrichello y Sebastian Vettel tenían que conformarse con las migajas. Pero si se habla de Brawn GP y la gran revolución que lideró a lo largo del año, hay que recordar los muchísimos más cambios que se esperaban para 2010, con la confirmación dos semanas después de cerrarse la temporada que los colores blanco y fosforito no volverían en 2010 tras anunciarse la compra del equipo por parte de Mercedes. La de las flechas de plata sería la única llegada de un fabricante y apenas serviría para compensar la marcha de dos importantes estructuras como BMW Sauber y Toyota. Afortunadamente, Sauber encontró la forma de seguir en solitario —aunque obligados a mantener el nombre de BMW por un año por contrato—, mientras en el caso de los japoneses, el equipo se perdió por completo.
Con ‘solo’ diez equipos en pista y la confirmación de que en 2010 habría una escuadra menos y dos sufriendo una importante transformación, a nadie le sorprendería que el proceso de entrada de nuevos equipos para la siguiente temporada fuese algo más caótico de lo esperado. En un principio se abrió la puerta a tres equipos nuevos; USF1, Virgin y Campos Meta, pero la marcha de Toyota obligó a replantear la situación, lo que implicó la llegada de Lotus. Al final, los americanos no llegaron ni a poner el coche en pista, mientras en España hubo cambio de dirección y de nombre a mitad del proceso. Se quedaron fuera estructuras tan importantes como Lola o Epsilon Euskadi, aparentemente en medio del juego político con Max Mosley que benefició a quienes usaban motores Cosworth.
En lo deportivo, Lewis Hamilton fue el primer hombre en lograr la pole position en el circuito de Yas Marina, con una excelente vuelta seis décimas por debajo del segundo clasificado, aunque siempre es importante recordar que en 2009 aún existían los repostajes, que precisamente también desaparecerían para 2010. Al lado de Hamilton, Sebastian Vettel partía desde la segunda posición con Mark Webber tercero y los Brawn detrás con Barrichello por delante de Button. El desastre de Ferrari seguía con un Kimi Räikkönen que solo podía ser undécimo mientras Giancarlo Fisichella era último en el complicadísimo F60. Fernando Alonso partía desde la décimo quinta posición, con Jaime Alguersuari una posición por delante. La sesión fue extraña por los problemas que tuvieron los pilotos a la hora de lograr meter temperatura en sus neumáticos, con una pista más fría de lo esperado.
En la salida, Hamilton mantuvo el liderato aunque en ningún momento llegó a escaparse con tanta autoridad como se esperaba. De esta forma, Vettel le seguía de cerca, marcando al británico en todo momento y esperando a que llegara el momento de pasar por boxes. Algo más atrás, Barrichello y Webber contactaron en la primera curva, dañándose el alerón delantero del brasileño. Cuando finalmente llegaron las paradas, tal y como estaba previsto Vettel logró hacerse con el liderato… pero los problemas de frenos del campeón del mundo del año anterior le privaron de intentar desafiar al que acabaría siendo campeón el año siguiente. Dos vueltas antes se había retirado Alguersuari, con problemas en su caja de cambios que le obligaron a cerrar la temporada de forma decepcionante.
En la zona delantera, Button protagonizó uno de los duelos de la carrera cuando al salir de boxes tras su parada, se encontró con el Toyota de Kamui Kobayashi persiguiéndole. El japonés estaba en solo su segunda carrera en la Fórmula 1 pero ya había demostrado su talento y su agresividad en Interlagos. Esta vez, el nipón no se dejó amilanar por el nuevo campeón y con un coche algo más ligero y neumáticos en temperatura, completó un adelantamiento antológico por el exterior de una de las horquillas del trazado abudabí. Kobayashi llegó a rodar tercero en un momento de la carrera, gracias a su estrategia distinta a la de la mayoría de rivales, aunque al final ‘solo’ pudo ser sexto, logrando tres puntos en su segunda carrera, la última que disputaría con Toyota en la Fórmula 1.
En cabeza, Sebastian Vettel vio la bandera de cuadros sin más problemas, logrando una nueva victoria en su primera temporada como candidato al título con Red Bull. El alemán ganó con diecisiete segundos de ventaja, confirmándose así como subcampeón tras superar a Barrichello, cuarto en carrera. Entre ellos, Mark Webber completó el doblete del equipo austríaco y Jenson Button pudo despedirse de Brawn GP en el podio, puesto que en 2010 sería piloto de McLaren. El británico había estado alcanzando al australiano en las últimas vueltas y a punto estuvo de superarle en el último giro. Las posiciones de puntos las completaron Nick Heidfeld en quinto puesto, el mencionado Kobayashi justo por delante de su compañero, Jarno Trulli y Sébastien Buemi con el Toro Rosso.
Peor lo tuvieron en Ferrari, sin puntos una vez más al acabar Räikkönen en duodécima posición mientras Fisichella era décimo sexto tras una carrera desastrosa con drive through incluído. Esto hizo que la Scuderia perdiera la oportunidad de mantener el tercer puesto en la clasificación de constructores y completaran su peor temporada desde 1993. Las cosas tendrían que cambiar mucho para 2010… ¡y vaya si lo hicieron! La llegada de Fernando Alonso sería uno de los revulsivos para que Ferrari lograra estar de nuevo peleando por ganar. También habría otros pilotos españoles en parrilla y si Jaime Alguersuari seguía con Toro Rosso, Pedro de la Rosa iba a volver a la competición con Sauber. Curiosamente, todos los pilotos españoles iban a usar motores Ferrari. Claro que, hablando del equipo italiano, la mayor sorpresa fue la marcha de Michael Schumacher del equipo… para volver a la competición en activo con Mercedes.
Pero más allá de los cambios de pilotos, de equipos, de normativas, la breve desaparición del KERS para 2010 y la marcha de los repostajes, el Gran Premio de Abu Dhabi de 2009 fue también la última vez que puntuaron 8 pilotos, así como la última que el ganador recibió 10 puntos por victoria. En 2010 se estrenó el actual sistema de puntaje de la Fórmula 1, que es hoy en día usado por la FIA en sus competiciones oficiales como son el WEC, el WRC o varias de las categorías de promoción de monoplazas. El Gran Premio de Abu Dhabi fue realmente el fin de una era en la categoría reina, antes de entrar definitivamente en la modernidad, para bien o para mal. Cerró además una temporada histórica que acabó dando paso a otra que será recordada tanto por lo sucedido en pista como fuera de ella. Una época menospreciada pero increíble en el automovilismo.
