La marcha de Audi a finales de 2020 es un golpe en todo el mentón para unas series que ya se encontraban tocadas tras las salidas de Mercedes-AMG y la decisión de R-Motorsport de cerrar el proyecto después de una única temporada. El panorama del campeonato no es el más esperanzador, teniendo especialmente en cuenta que se encontraban en una fase muy avanzada al respecto del reglamento Class One, y que en este se tenía en cuenta la continuidad de la firma de los cuatro aros, así como un posible trasvase de equipos y marcas niponas hacia el campeonato organizado por ITR.
Con una única firma alineada hacia su continuidad en 2021, BMW Motorsport, el DTM debe en los próximos meses no solo evaluar las posibles medidas a tomar para llevar adelante la temporada actual, sino que también deberá hacer una reestructuración de emergencia ante el futuro a corto plazo del campeonato. A esto se le ha dado ya nombre propio, después de reconocer que la opción GTE podría volver a estar sobre la mesa para 2021 como forma de transición hacia un nuevo reglamento con características más ‘eco-friendly’.
La propuesta viene de la mano de Altfrid Heger, antiguo competidor, el cual ha rescatado esta idea teniendo en cuenta la situación actual no solo del DTM, sino también la que pueden vivir los GTE en los próximos años. Se debe considerar por tanto que los coches y marcas que compiten en la “tercera división” del WEC y del IMSA afrontan unos años en los que pueden verse ensombrecidos por la llegada de los LMH y los LMDh, los cuales también guardarán similitudes estéticas con los hiperdeportivos de calle. Si en el pasado los fabricantes ya pedían cierto protagonismo para estos coches, el tener un campeonato que ponga el foco completamente sobre ellos puede ser una solución, al menos de emergencia.
Coches como el Porsche 911 RSR, un Chevrolet Corvette, un Aston Martin o un Ferrari sin duda serían la transición correcta para el DTM. Estos GT son actualmente la guinda del pastel en el WEC. Y son de fácil acceso. Es por eso que vería estos autos como autos de clientes en el DTM en este momento, tal vez en conjunto con los coches de Class One. Incluso podrían correr juntos durante un año o dos
La opinión de Heger, el cual cree que los GTE podrían competir con los coches bajo reglamentación Class One (parece impensable que veamos a los M8 GTE y el M4 DTM competir frente a frente) contrasta precisamente con la de Hans-Joachim Stuck, el cual también ha propuesto que el DTM debería abandonar los coches actuales y adoptar los GT3 como vehículos principales, aunque obviamente viéndose obligados a cambiar la filosofía del campeonato para evitar entrar en una confrontación directa frente a la serie germana del ADAC GT, uno de los campeonatos nacionales de GT3 más fuertes a nivel europeo.
Vía | Autosport