BMW es la marca a batir en esta sexta temporada de la Fórmula E. Ya avisó en la quinta, si bien su forma del inicio de la temporada no se mantuvo a lo largo de la campaña, pero su privilegiada situación tras tres ePrix invita al optimismo entre los muniqueses. En Santiago de Chile, Maximilian Günther estrenó su casillero de triunfos tras demotrar que no sólo tienen velocidad sino que además saben gestionar las carreras, algo que se reveló clave en una prueba de eliminación.
Lo sucia que estaba la pista en clasificación lastró enormemente a quienes mejor clasificados salieron de Ad-Diriyah, condenados a un primer grupo terminó siendo Stoffel Vandoorne, tan sólo noveno. A ello se sumó el accidente de Oliver Rowland en ese mismo grupo. Ello condenaba a Alexander Sims, líder del campeonato y poleman recurrente en las últimas citas. Pero quedaba su compañero Maximilian Günther, que a punto estuvo de apuntalar el dominio de BMW a una vuelta: fue segundo, tan sólo superado por el Jaguar de Mitch Evans. Tras ellos se situaron Wehrlein, Massa, el sorprendente Turvey con el NIO 333 y Buemi, en busca de sumar puntos tras el cero de Arabia Saudí.
La arrancada de Mitch Evans desde la pole fue francamente mejorable, pero el kiwi aguantó en cabeza y además se vio beneficiado del adelantamiento de Pascal Wehrlein a Maximilian Günther en las enlazadas iniciales, dándole aire. El caos se desató por detrás, con numerosos toques (Jani O, pinchazo de Frijns, daños de Lotterer y Sims…) entre quienes debían buscar la remontada desde lejos. Y esa ferocidad en el pelotón fue la tónica habitual durante la carrera, lo cual a la larga benefició a quienes más intactos pudieron mantener sus coches.
Así, de los dos Techeetah mientras Jean-Éric Vergne se tocaba con todo monoplaza en pista, António Felix da Costa se aprovechaba tras su estela, como courrió durante el breve periodo de Safety Car Virtual al retirar el monoplaza de Sims. Tantas víctimas se cobró la fibra de carbono como el calor, pues a medida que avanzó la carrera se observaron cambios de ritmo inesperados. Una mezcla de ambos factores terminó lastrando a los Venturi, pues Edoardo Mortara y Felipe Massa pasaron de aspirantes al podio a luchar por no quedarse sin puntos, algo que logró por los pelos el brasileño (9º) tras llegar incluso a protagonizar un cerrojazo entre compañeros de equipo.
El carrusel de ‘Modo Ataque’ brindó a Maximilian Günther la oportunidad de sumarse a la victoria de etapa y con ello pasó a ser segundo y luego a atacar a Mitch Evans, a quien tras estar a punto de tocar en la primera curva terminó superando metros más tarde aprovechando la diferencia de potencia. Algo similar ocurrió con António Felix da Costa, quien con un monoplaza prácticamente intacto y ayuda del FanBoost progresó. Evans apenas opuso resistencia, centrado en sus problemas de consumo y el portugués adelantó a Günther a sólo dos minutos del final en una maniobra de dudosa deportividad al desestabilizarle llegando a la horquilla.
Mas era un espejismo. La radio advirtió a Günther de que aún había tiempo, pues el luso tenía la temperatura de la batería por las nubes. Y se la devolvió para sumar su primer triunfo en Fórmula E, convirtiéndose además en el ganador más joven en detrimento del propio Da Costa. De Vries alcanzó y superó a Evans en la lucha por el tercer puesto, pero el neerlandés de Mercedes arrastraba una sanción de cinco segundos por irregularidad técnica que le dejó 5º, tras el propio Evans y Wehrlein, que supo aguantar en las últimas vueltas arriba sin ritmo.
Completaron la zona de puntos Vandoorne, Di Grassi, Calado, el ya mencionado Massa y Bird, no viendo meta Jean-Éric Vergne al desprenderse parte del frontal de su Techeetah a consecuencia de los numerosos incidentes en que se vio envuelto. Aunque el francés intentó seguir adelante levantando una humareda espectacular, finalmente se retiró.
El sexto puesto en Santiago de Chile permite a Stoffel Vandoorne situarse a la cabeza del campeonato, con tres puntos de ventaja sobre Alexander Sims, pese a que el británico se va de vacío de Chile. La próxima cita de la Fórmula E 2019-20 tendrá lugar en México a mediados de febrero.
Foto | BMW Motorsport