La nueva política arancelaria propuesta por la administración Trump ha comprometido las finanzas de Haas Automation, que ha visto caer la demanda de sus productos, maquinarias y herramientas, hasta el punto de afectar de manera muy negativa sus operaciones a nivel global, lo que coloca en mala situación a la escudería Haas F1. Ante la problemática que se le viene encima, Gene Haas estaría meditando la opción de vender una participación a Toyota para que de esta forma el fabricante japonés pueda inyectar recursos ante cualquier eventualidad.
Actualmente Haas F1 disfruta de una alianza técnica con Toyota Gazoo Racing cuyo alcance es incierto porque la escudería estadounidense se mantiene como cliente de Ferrari. Si bien Masaya Kaji, jefe de Toyota Gazoo Racing, comunicó que no había planes inmediatos para transformar a Haas en equipo Toyota, en Japón pudo observar lo que significa la presencia del fabricante en la parrilla de la Fórmula 1, lo que deja la puerta abierta para intensificar las inversiones en una escudería que bajo la gestión de Ayao Komatsu ha demostrado capacidad para evolucionar de forma positiva.
Mientras tanto, desde Haas Automation, que se presenta como el principal patrocinador de la escudería, han aplicado medidas como reducir la producción, eliminar las horas extras de sus empleados y suspender contrataciones y solicitudes de reclutamiento. A diferencia de grandes patrocinadores multinacionales presentes en la Fórmula 1, Haas Automation opera únicamente desde sus instalaciones ubicadas en Oxnard, California, de allí que la nueva imposición de aranceles afecte el comercio interno y externo, y es que muchas piezas para ensamblar las maquinarias son importadas y los proveedores se niegan a pagar los nuevos tributos.
Gene Haas buscaría entonces fortalecer la estructura interna de su escudería de Fórmula 1 y eso pasaría por involucrar más a Toyota, con ello tendría una tabla de salvación en caso de que Haas Automation deba apartarse como patrocinador principal.
Vía Motorsportweek