El Gran Premio de Australia ha vuelto a poner a Toro Rosso y Honda en su sitio. Nada tiene que ver con esos elogios que se hacían ambas partes durante la pretemporada. Quizás si exista esa comunicación que tanto deseaban en Honda, pero la fiabilidad sigue sin ser su punto fuerte por el momento.
En el circuito de Albert Park los resultados de pretemporada se desvanecieron y no lograron pasar de la Q1, algo llamativo, puesto que en el Circuit Barcelona-Catalunya estaban contentos con el rendimiento del motor y la velocidad punta que estaban alcanzando. Sin embargo, por diversos motivos en Australia no han podido demostrar ese progreso que tanto querían mostrar.
Pierre Gasly ha vivido el lado más oscuro del motor de Sakura. Con tan sólo 15 vueltas disputadas el motor se le apagó y se encendió a medio gas, haciendo que el piloto tuviera que retirarse. Sin duda, el inicio del Mundial no ha sido el que esperaban en la escudería de Faenza.
Al parecer, según ha comunicado Honda, todo ha sido causado por un error desconocido en el MGU-H. De este modo, el motorista sigue en su habitual tendencia de continuos problemas en su unidad de potencia, algo que ya se pudo comprobar en los últimos años cuando competían con McLaren.
Quedan 20 Grandes Premios por delante y por lo tanto, tiempo más que suficiente en Honda para acabar de pulir algunos detalles en sus motores. Sin embargo, se intuye que Gasly no podrá completar el campeonato sin recibir penalización, puesto que en caso de no poder recuperar ese motor, tendrá que disputar esas citas con sólo dos motores, algo que es realmente improbable.
Es decepcionante que Pierre Gasly haya tenido que retirarse en la vuelta 15 con un problema MGU-H. Ahora tenemos que investigar la causa exacta y luego tenemos unos días de duro trabajo para asegurarnos de que no se repita el problema en la próxima carrera.
Vía | Toro Rosso