No se sabe demasiado acerca de todo lo que hay detrás del proyecto de Isotta Fraschini en el mundo de la resistencia, sin embargo, la compañía sigue dando pasos adelante y en sus redes sociales ya ha mostrado los avances en los trabajos que se están realizando sobre el monocasco de fibra de carbono de su nuevo prototipo. El objetivo es tenerlo todo listo de cara al último día de este mes de febrero, concretamente, para la presentación oficial que se realizará en Milán.
Isotta Fraschini ha seleccionado ese día 28 de febrero como el momento más oportuno para presentar al mundo su nuevo proyecto junto a Michelotto (producción del coche) y Vector Motorsports (gestión en competición) para competir en resistencia. Será la oportunidad de desvirtualizar a un Tipo 6 LMH-C (la C proviene de la palabra Competizione, un recurso muy habitual para las firmas italianas) al cual ya hemos visto en numerosos renders desde que se anunciara el pasado mes de noviembre, esperando ver si la decoración incorporará a los primeros patrocinadores o si seguirá manteniendo esa carrocería completamente impoluta.
Por el momento, en todas las imágenes promocionales empleadas por Isotta Fraschini podemos apreciar que se ha optado por relacionar este nuevo Le Mans Hypercar con el Tipo IM de la marca que compitió a principios del Siglo XX en Indianápolis. Después de más de 110 años de diferencia entre el proyecto original y esta nueva era de la compañía, todos los ojos permanecen centrados en saber si podrán cumplir con su meta de debutar este mismo año en el WEC, ya sea en las 24 Horas de Le Mans o en la fecha que se celebrará en julio en el Circuito de Monza.
Para ello, no sólo habrá que realizar una presentación con toda la pompa y boato de la ciudad milanesa, sino que deberán afrontar meses pruebas, algunas de ellas de larga duración como marcan los estándares de la disciplina, y quizás lo más importante, contar con nuevos pilotos que lleven todo este trabajo en pista, los cuales puede que sean también anunciados el próximo 28 de febrero.
Siempre es ilusionante volver a ver a un pequeño fabricante transalpino poner toda su ilusión para estar entre las grandes corporaciones internacionales y las marcas de deportivos históricas como Ferrari o Porsche, pero todo parece apunta a que la planificación es demasiado ajustada para afrontar un reto de estas dimensiones, especialmente si lo comparamos con los plazos que se han marcado en otros proyectos como los de la Scuderia Cameron Glickenhaus o la Vanwall de By Kolles. El tiempo lo dirá. De conseguirlo, sería el sexto Le Mans Hypercar homologado tras el Toyota GR010 LMH, el Ferrari 499P, el Peugeot 9X8, el SCG 007 o el Vanwall.
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