Empezó la Monster Energy NASCAR Cup Series con el siempre extraño Clash, un evento corto tan monótono como excitante cuando sus integrantes tienen prisa. La lluvia ayudó a que los pilotos quisieran competir después de un comienzo aburrido y Jimmie Johnson fue el que mejor se movió de todos. El piloto de Hendrick ganó por segunda vez esta carrera (primera desde 2005) y cortó su sequía de victorias, que llevaba activa desde junio de 2017, en el primer Clash acortado en 40 años de historia después de un Big One que arrasó con prácticamente toda la parrilla.
Kyle Busch, Paul Menard y Brad Keselowski salieron al frente y los Penske dejaron solo al piloto de Gibbs tras solo una vuelta. Menard, Keselowski, Alex Bowman, Joey Logano y Ryan Newman formaban el top 5 en fila de a uno, con los 20 coches juntos pero sin estar en paralelo hasta el octavo giro, cuando una pequeña lluvia obligó a NASCAR a sacar la bandera roja. Menard, Keselowski, Logano y Blaney y Newman relegaron pronto a Bowman en el grupo y encabezaron la carrera por delante de los hermanos Kurt y Kyle Busch, decidiendo entrar 15 de los 20 pilotos en boxes con la bandera amarilla de la vuelta 25.
Austin Dillon, Bowman, Jamie McMurray, Kevin Harvick y Martin Truex Jr. pararon en la caution y Menard lideró frente a un inteligente Denny Hamlin y a los hermanos Busch. Volvió a interrumpirse la carrera por culpa de la lluvia en la vuelta 39 y los jet dryers hicieron acto de presencia durante la misma caution, resaliendo diez giros después con Menard, Johnson, Kurt y Kyle Busch. Hamlin, Keselowski, Larson y Newman intentaron sin éxito tirar de la línea interior, que después tomaron Logano y Blaney con más ayudas y un grupo de siete vehículos.
El Big One llegó a falta de 20 vueltas y arruinó cualquier posibilidad de final en bandera verde: Johnson atacó a Menard y se lo llevó por delante cuando el de Wood Brothers no vio a tiempo al heptacampeón. Solo Kurt Busch, Logano y Blaney pasaron el accidente ilesos, quedando dañados Kyle Busch, Larson, Jones, Hamlin sobremanera y forzando una bandera amarilla durante la cual llegó la verdadera tormenta. El Clash finalizó acortado por primera vez en sus 40 años de historia y Johnson venció a Kurt Busch, Logano, Blaney y Bowman, rompiendo su mala racha de forma psicológica en una cita no puntuable.
Chaos in the #AdvanceAutoClash on Lap 55! pic.twitter.com/GtXUmwmYHy
— NASCAR (@NASCAR) 10 de febrero de 2019
