Las dos semanas de pruebas en el Circuit de Barcelona-Catalunya ayudan a los equipos del Mundial de Fórmula 1 a descubrir engranajes y a refrescar procedimientos en un contexto de velocidad mesurado. Toro Rosso aprovechó la situación al máximo y fue el cuarto equipo que más vueltas efectuó en los ocho días, solo por detrás de Mercedes, Ferrari y Renault. En apenas una semana, Jody Egginton ha pasado a ser el director técnico de la escuadra transalpina al dejar el puesto adjunto ante la marcha oficial de James Key en dirección a McLaren y envió el mensaje habitual de prudencia ante la igualada zona media.
«Cada día hemos sumado más kilómetros en los test y hay que saber usar bien los neumáticos para ello. El desgaste es importante para no gastar más juegos de los establecidos por Pirelli«, dijo Egginton para justificar el programa del equipo italiano. «El grupo medio es muy grande, no me atrevo a decir quien puede liderarlo a estas alturas. Los test implican diferentes pruebas en sí mismas con cargas de gasolina y gomas». También comentó que ni Daniil Kvyat ni Alexander Albon habían destacado «nada bueno o malo cuando han seguido a otros coches para intentar adelantarles, habrá que esperar a Australia para juzgar la nueva aerodinámica».
Precisamente Albon marca algunos de los objetivos básicos en su debut como piloto de Fórmula 1, que Egginton y los técnicos de Toro Rosso califican como excelente visto su nulo rodaje previo. «De momento va aprendiendo, no conoce algunos de los primeros circuitos del calendario y tendrá que adaptarse bien a la vida útil del neumático», explicó Egginton aplaudiendo el trabajo del tailandés. «La gente de Toro Rosso está acostumbrada a trabajar con pilotos nuevos y él tiene tanto margen de mejora como el coche. Podría haber sido más rápido en los test pero es un piloto constante y mejora poco a poco».
Destacó el director técnico la labor de Honda. «Han mejorado en invierno, saben como trabajamos en nuestro segundo año juntos y esperamos que los resultados lleguen en la pista. Repetir motorista da sus frutos, ya que el año pasado sufrimos más y tuvimos que cambiar muchas partes al final de la temporada». Advirtió el inglés que el plan del equipo de Faenza es usar tres unidades de potencia en todo 2019. «La fiabilidad es buena y tendremos que estar preparados para un cansancio elevado. Hemos probados dos motores en los test y el primero fue cambiado porque queríamos probar algunas cosas, no porque necesitase un recambio».
Para confirmar de forma indirecta el estatus de Toro Rosso como segundo equipo de Red Bull, Egginton desveló que la parte trasera, la suspensión y la caja de cambios son iguales que el Red Bull RB14 «y nosotros le hemos añadido nuestra propia maquinaria. Todas esas partes forman una mezcla que funciona por el momento, no creo que salgamos perjudicados». Ante la pregunta (realizada en tono jocoso) de si montar algunas partes iguales que el Red Bull podría considerarse espionaje, Egginton respondió que «se puede considerar ingeniería pragmática, la estructura entra dentro del motor Honda, pasó los crash test sin problemas y forma parte del chasis».
