Patryk Krupinski, jefe del equipo polaco JP Motorsport, manifestó que decidió cambiar el Mercedes AMG GT3 por un McLaren 720S GT3 para intervenir en tres fechas del DTM, debido a que se sentía en desventaja por el soporte que ofrecía el programa alemán. Aclaró que no se trata de comparar coches sino del trato puesto que ha advertido como los equipos Winward Motorsport y GruppeM disfrutan de un trato preferencial: coches gratis, alrededor de 200 mil euros de financiamiento, un camión de repuestos y la asignación de un ingeniero proveniente de AMG; mientras su equipo debía reunir un presupuesto mayor al estimado para poder realizar una temporada parcial.
Por su parte Thomas Jäger, coordinador del área de clientes de Mercedes AMG, refutó las declaraciones de Krupinski argumentando que todos los equipos respaldados por el fabricante reciben exactamente el mismo trato para que ninguno tenga la sensación de competir en desventaja. Añadió que Mercedes AMG selecciona a los equipos a los cuales apoyará y en este caso la solicitud de JP Motosport llegó muy tarde y sin los requisitos completos. El equipo polaco realizó un buen trabajo en el GT-Open, en la clase Pro-Am, con un Mercedes AMG-GT3, pero eso no significa que de forma automática recibirán el apoyo para ir al DTM ya que la exigencia es superior.
Jäger señaló que cada equipo que toca a las puertas de Mercedes AMG es recibido, pero debe cumplir unos plazos establecidos para tener la opción de estar en los planes del departamento de clientes. Cuando apareció JP Motorsport pidiendo apoyo para el DTM se les pidió garantías como un número de personal capacitado y un presupuesto para financiar sus propias operaciones, eso es crucial para recibir el apoyo. Al advertir que no disponían de tales elementos no pudieron otorgarles el privilegio de integrarse al programa. Además, el Mercedes-AMG GT3 utilizado por JP Motorsport en el GT Open no era elegible para competir en el DTM porque es de una generación previa al 2016, así que requerían de presupuesto y garantías para alquilar un coche nuevo.
Ante esta negativa, desde McLaren ofrecieron un soporte muy atractivo para convencer a Krupinski. Es de recordar que este año, el equipo 2-Seas Motorsport, también inscrito en el DTM, vendió sus dos McLaren 720S GT3 para adquirir unidades Mercedes. Se explicó que el fabricante británico tiene a disposición el nuevo 720S GT3 a precio por debajo al medio millón de euros y si bien el apoyo técnico y financiero para competir es menor al proporcionado por Mercedes, la exclusividad de competir con McLaren hizo que JP Motorsport se inclinara por esta opción.
En palabras de Patryk Krupinski:
El Mercedes-AMG GT3 es un producto bueno y robusto. El apoyo de fábrica es significativamente más fuerte en comparación con otros, pero en el DTM representa una inmensa desventaja porque los mejores equipos tendrán los mejores resultados, eso está muy lejos para nosotros. Apenas podemos esperar a las primeras carreras con McLaren y estamos muy ilusionados con su rendimiento, que ya nos ha impresionado como competidor en el GT Open.
Vía | Motorsport Total
