Cuando se conoció el pasado mes de enero que la relación profesional entre Ford y Ken Block llegaba a su fin tras más de una década, muchos nos preguntamos qué sería de los coches de la firma del óvalo que el estadounidense ha ido coleccionando durante este periodo. Muchos de ellos con un precio de venta desorbitado, se han convertido en leyendas del mundo del motorsport, ayudados por el éxito de los vídeos de acción protagonizados por el precursor del movimiento Gymkhana. Ahora ya tenemos respuesta para todas estas dudas… y si tenéis una buena cantidad de dinero ahorrado seguramente os intereses.
A la espera de conocer el destino del Hoonicorn o del Hoonitruck, Ken Block y su Hoonigan Racing ya han confirmado que algunas de las unidades de su propiedad saldrán próximamente a la venta a través de la prestigiosa casa LBI Limited. No son unidades del montón, a la disposición de los interesados nos encontramos con los Ford Fiesta ST GYM3, el RX43 y su precioso Ford RS200 de 1986, vehículo este último que ha empleado para sus desplazamientos personales, cumpliendo de esta forma sus sueños de juventud.
El Ford Fiesta GYM3 de Olsbergs y el RX43 de M-Sport:
Pero vayamos por partes. Para el que no lo conozca, el Ford Fiesta ST GYM3 es como bien indica su nombre el protagonista de la tercera edición de la Gymkhana de Ken Block. Rodada en 2011, se trataba de su primer trabajo con el fabricante de Detroit y sus impresionantes malabares a su volante provocaron que fuera uno de los vídeos más exitosos con 66 millones de visitas en YouTube. Creado por Olsbergs MSE, nos encontramos con un vehículo similar al que la compañía sueca empleaba en el Campeonato de Europa de RallyCross, con motor 2.0 turbo de 600 CV de potencia, tracción total y la mayor diferencia de que se trataba de una carrocería cinco puertas en lugar de la tradicional de tres. Como curiosidad, esta unidad era la que podía transformarse y adaptar para competir en los rallyes del nacional americano
En cuanto al Ford Fiesta ST «RX43», estamos básicamente ante el vehículo de rallycross que Block empleó en su participación en el Global RallyCross Championship y que posteriormente apareció tanto en la menos popular sexta Gymkhana, en la octava edición llevada a cabo en Dubái y en los spin-off conocidos como Terrakhana. Desarrollado por M-Sport, se trata de un vehículo específico para la competición, por lo que, si no es vendido por un precio desorbitado, es posible que lo terminemos por ver en alguna carrera de nuevo.
Un ícono del WRC modernizado por Ken Block:
Para el final, la joya de la corona. El Ford RS200 de Ken Block fue una de las pocas unidades de las 200 disponibles que pudo encontrar disponibles en el mercado, por lo que se dio el capricho después de haberse puesto al volante de uno de las variantes de rallyes en un viaje a Europa. Aunque lo adaptó a su estilo e imagen preferidas, el RS200 ha mantenido muchos de sus elementos originales, haciéndole algunos retoques al motor para que entregue más de 700 CV, modificaciones en la suspensión y pequeños cambios estéticos que pueden ser fácilmente reversibles. No sería de extrañar que a pesar de que el deportivo 4×4 de Ford ya alcanza sumas importantes en su versión de serie, esta pueda ser una de las más caras de la historia a pesar de no mantenerse 100% como recién salida del concesionario.
De esta forma, es previsible que proyectos como el Hoonifox, aquella transformación de un Ford Mustang Foxbody se queden en el tintero y que nunca lleguen a convertirse en realidad. En los últimos meses ya hemos visto cómo se han vendido otros modelos, entre ellos el Subaru Impreza WRX STi de 2002 con el que compitió en rallyes, el Ford Fiesta HFHV y el Ford Focus RS RX con el que participó en el Mundial de RallyCross y en el ARX.