Zak Brown, CEO de McLaren, asomó que el año que viene el piloto Kyle Busch sería invitado a competir en las 500 Millas de Indianápolis, así que Arrow McLaren SP tendría cuatro monoplazas en pista para tal evento. De ser así, Busch estaría en vías de convertirse en el sexto piloto de la NASCAR Cup Series en participar en la Indy 500 y la Coca Cola 600, el conocido Double Duty o Memorial Day Double, esfuerzo que no se oberva desde el 2014 cuando Kurt Busch finalizó sexto en la Indy 500 pero no pudo completar el recorrido en la prueba de stock car.
Kyle Busch ostenta dos títulos de la NASCAR Cup Series, años 2015 y 2019, y este año anunció que para 2023 defenderá los intereses del equipo Richard Childress Racing, por tal razón podrá competir en la IndyCar bajo el amparo de Chevrolet, lo que no podía hacer mientras estaba bajo contrato de Joe Gibbs Racing. En cuanto a Arrow McLaren SP, la próxima temporada tendrá a tres pilotos de tiempo completo: Patricio O’Ward, Felix Rosenqvist y Alexander Rossi, dejando aún por confirmar oficialmente el monoplaza adicional que suele inscribir el equipo en la Indy 500, mismo que en los dos últimos años fue confiado a Juan Pablo Montoya.
De materializarse la invitación, sería un gran desafío para Busch, que a sus 37 años, afrontaría dos eventos de alta exigencia. Su experiencia en monoplazas de la IndyCar es escasa, pero los antecedentes de John Andretti, Robby Gordon, Tony Stewart y Kurt Busch resultan alentadores, siendo la presentación de Stewart en el año 2001 la mejor entre todas, al finalizar sexto en Indianápolis y tercero en Charlotte.
Vía | Motorsport Week
