Se han manifestado fuertes criticas hacia los movimientos que constantemente realiza el Red Bull Junior Team, pero también se debe analizar que desde su instauración, en el año 2018, como una iniciativa de Sauber Motorsport, la Academia Sauber todavía no ha promovido a ninguno de sus integrantes a la Fórmula 1 y lo que resulta más preocupante es que tanto Théo Pourchaire como Zane Maloney están fuera del programa, el primero pasó a ser ficha de Peugeot en el Campeonato Mundial de Resistencia y el segundo del equipo Lola Yamaha ABT en el Campeonato de Fórmula E. Ambos pilotos reunían las credenciales para ascender hasta la Fórmula 1, inclusive Pourchaire fue campeón de la Fórmula 2, pero ninguno fue tomado en cuenta para un asiento titular, sus tareas apenas se limitaron a permanecer en la reserva y pasar horas en el simulador.
Callum Ilott, Raoul Hyman, Fabio Scherer y Lirim Zendeli también llegaron a pertenecer al programa de Sauber y ninguno llegó a proyectarse como potencial piloto de Fórmula 1. Lo más preocupante de este asunto es que ni siquiera los resultados en pista pueden constituir una garantía para ser tomados en cuenta, el caso Pourchaire es el más representativo ya que a sus 20 años ganó el título de la Fórmula 2 y tras Sauber recuperar el control de la escudería de Fórmula 1, para entonces Alfa Romeo dejó el patrocinio y Audi todavía no había adquirido la propiedad, el piloto francés fue sistemáticamente ignorado de cualquier opción para ser titular, concediendo la libertad de acción para ir a competir a Japón, Estados Unidos o cualquier otro lugar donde sea requerido.
Ahora, tras confirmarse que Nico Hülkenberg y Gabriel Bortoleto conformarán la formación de Sauber en 2025, con altas probabilidades de mantenerse durante el primer ciclo de Audi en la Fórmula 1, la Academia Sauber estaría apuntando hacia su desaparición y es porque previamente se concedió un asiento a Guanyu Zhou, producto del programa Alpine, y posteriormente a Bortoleto, formado en las filas de McLaren. Es evidente entonces la ineficiencia de la iniciativa de Sauber, y de la gestión de Beat Zehnder, en lo que respecta a la preparación y promoción de jóvenes pilotos en su camino hacia la Fórmula 1 porque ninguno pudo llegar a su destino.
Actualmente la Academia Sauber está conformada por las pilotos Léna Bühler, Carrie Schreiner y el adolescente alemán Taym Saleh, todos con opciones muy remotas de ascender hasta la máxima categoría. Quedaría entonces en manos de Audi tomar una decisión en lo que respecta a este programa porque a todas luces ha sido un fracaso cuyo peso sería incómodo de arrastrar.