Tras imponerse en la división OK de la fecha pautada en Portimao, al piloto Artem Severiukhin no se le ocurrió una mejor idea que celebrar realizando unos gestos en el podio que la mayoría de los presentes interpretó como un saludo nazi, de allí que la propia FIA inició una investigación al respecto. No obstante, y antes de que la federación emitiera un comunicado definitivo al respecto, el equipo Ward Racing decidió rescindir el contrato del piloto, así que prácticamente se le cerraron las puertas a nivel profesional al joven de 15 años por cometer tal imprudencia.
Severiukhin es un piloto ruso que compite bajo licencia italiana, situación que complicó su celebración porque si bien se le puede conceder el beneficio de la duda al no poder controlar sus emociones debido a la adrenalina que genera una victoria, el saludo lo realizó mientras sonaba el himno de Italia, y ese gesto en particular está prohibido en ese país desde 1952 por su asociación con el fascismo. Además de ello, su brazo derecho alzado y sus posteriores carcajadas se tomó como un mensaje de apoyo a Rusia en la invasión armada que está ejecutando ya que una de las razones que esgrime el presidente Vladimir Putin para realizar sus acciones bélicas es desnazificar a Ucrania.
Aunque tras el evento Severiukhin pidió disculpas públicas por su acto, argumentando que sus gestos fueron percibidos de forma equivocada, puntualizando además que no apoya al nazismo, el equipo Ward Racing tomó medidas contundentes ante lo sucedido. En el comunicado se puede leer que se sienten profundamente avergonzados por el comportamiento del piloto y aclaran que la actuación de Artem Severiukhin durante la ceremonia del podio fueron exclusivamente individuales y no representan los puntos de vista o valores de Ward Racing.
De allí que basados en lo que consideran una manifestación de comportamiento antideportivo y una violación inaceptable de la ética y la moral tomaron la decisión de no continuar la cooperación con Artem Severiukhin, por tal razón se procedió a rescindir su contrato de forma inmediata. Horas después, la Federación Italiana de Automovilismo informó que había revocado la licencia de carreras del piloto porque no están dispuestos a avalar comportamientos de ese tipo ya que va en contra del deporte, la humanidad, la dignidad y la convivencia.
