¿Y si el hecho de que Toyota rodara en el Prólogo de Paul Ricard hace unas semanas fuera de reglamento tenía más miga de lo que parecía? La marca japonesa optó por exprimir al máximo su mecánica con el fin de poner a prueba la fiabilidad y así logró registros mucho mejores que su competencia, pero la prensa especializada advirtió que cuando los TS050 regresaron a rendimientos reglamentarios la diferencia fue mucho mejor. Y la FIA debe estar de acuerdo a tenor de la decisión tomada en vísperas del inicio del Mundial de Resistencia 2018-2019.
Según ha desvelado Sportscar365, la última actualización de la ‘Equivalence of Technology’ (denominación de la Balance of Performance que rige la categoría LMP1 en el Mundial de Resistencia) publicada por la federación internacional indica que los LMP1 no híbridos, es decir, los privados, tendrán menos autonomía de lo inicialmente previsto de cara a la primera cita del WEC 2018-2019.
En principio a una vuelta no deberíamos ver diferencias y hasta no sería raro ver a uno de los nuevos LMP1 como el BR1 ruso o el R13 de Rebellion marcar la pole. Pero sabiendo que la gran baza de Toyota era ya poder dar más vueltas por relevo que la competencia, parece complicado que planten cara en carrera, bien por tener que hacer más paradas por deber levantar el pie en carrera.
Via | Sportscar365
Foto | SMP Racing
