Allengra GmbH, empresa de origen alemán, ganó el concurso de licitación para convertirse en proveedor de sensores de flujo de combustible en la Fórmula 1 a partir de la temporada de 2026 y hasta el 2030, lo que significa que sus dispositivos se instalarán durante el nuevo ciclo de regulaciones técnicas. La compañía garantiza que sus productos están fabricados a partir de la tecnología más sofisticada, de allí que garantizan los resultados más óptimos. Los sensores de Allengra también se utilizan en el Campeonato Mundial de Resistencia y en el Campeonato Mundial de Superbikes, así que goza de prestigio dentro del deporte motor.
Se indicó que los primeros prototipos de los sensores de 2026 superaron con éxito las pruebas realizadas durante los tests de postemporada celebrados en Abu Dhabi. Allí las escuderías McLaren, Mercedes, Williams y Sauber instalaron los dispositivos en sus respectivos monoplazas, también se pudo comparar el funcionamiento de los nuevos sensores con los de generación anterior que se utilizarán hasta el año que viene. Al respecto, desde Allengra se mostraron satisfechos con el nivel alcanzado con su producto, afianzando su reconocimiento en lo que respecta a dispositivos ultrasónicos para usos industriales y altas exigencias.
Allengra se caracteriza por utilizar alta tecnología en aparatos de tamaño miniatura y se espera que el prototipo presentado sea más pequeño y eficiente en su versión final. El próximo paso, según explicó Raúl Junker, fundador y CEO de Allengra, es recibir las muestras del nuevo combustible sintético producido a partir de biomasa puesto que en las pruebas el caudalímetro midió el combustible fósil E10, el cual contiene un 10% de etanol. Añadió que otro objetivo importante es adaptar los sensores hasta un nivel de precisión que esté por el orden del 0,5% de tolerancia de error que es lo que exige la FIA para aprobar el uso de este tipo de dispositivos.
La tecnología implicada se relaciona con el método de transducción ultrasónica, acá el sensor emite y recibe señales a partir de la velocidad y el movimiento de olas que se producen en el tanque de combustible, allí se determina el volumen del flujo de combustible que está utilizando el monoplaza y se compara con el límite estipulado en el reglamento. Con este avanzado método, la empresa Allengra GmbH ganó el pulso a otros participantes en la licitación tales como Gill Sensors & Controls y Sentronics.
En palabras de Martin Baerschneider, especialista en sistemas de propulsión de la FIA:
Estamos satisfechos de que los sensores de flujo de combustible utilizados hayan funcionado de forma confiable. La señal es buena. Ahora hay que adaptar la instalación, el montaje debe realizarse de otra manera y es posible que también haya que redireccionar los mazos de cables y las tuberías de combustible.
Vía Allengra
