Ha sido uno de los temas más polémicos desde el pasado Rally de Suecia. La FIA dejó entrever que no estaba dispuesta a volver a ver a los World Rally Cars superar los 130 km/h de velocidad media en los tramos del Mundial, algo que desató toda una cascada de críticas, tanto entre aficionados como pilotos. Según Autosport, una reunión durante la cita mexicana entre FIA y competidores al volante de un WRC 2017, dejó visto para sentencia esta iniciativa que paradójicamente no aparecerá en la normativa.
Al menos eso es lo que ha desvelado Jarmo Mahonen, director del área de rallyes de la FIA al medio británico. Según el finés, no se prohibirán las especiales rápidas que vayan a superar los 130 km/h de velocidad media, pero sí se estudiará caso por caso para evitar que haya situaciones de peligro en el futuro o que se repitan tramos en años sucesivos que puedan suponer una brecha de seguridad para los pilotos del Campeonato del Mundo.
Obviamente esto va dirigido a casos como el tramo que la FIA aconsejó cancelar en el pasado Rally de Suecia. A pesar de que las medias eran cercanas a los 138 km/h, los pilotos no consideraron que fuera una especial peligrosa, debido a la presencia de largas rectas separadas por curvas lentas. No nos encontramos con una situación similar a la vivida en Polonia el año pasado, cuando los tramos del domingo, que parecían simplemente rápidos, supusieron un peligro debajo a las bajas condiciones de grip presentes a raíz de las fuertes lluvias.
Precisamente rallyes como Polonia, Argentina o Finlandia estarán este año bajo la lupa de los comisarios, incluso Mahonen ha declarado que estaba ciertamente disgustado ante el plan inicial presentado por los organizadores del 1.000 lagos al considerar que no se habían atendido sus indicaciones el año pasado, tras la que fue la edición más rápida de la historia del Rally de Finlandia. No se quiere imponer la utilización de chicanes en especiales como Ouninpohja, pero sí se sugiere un cambio leve de ruta que baje las velocidades medias. No puede haber más brechas de seguridad, especialmente después de lo sucedido en Monte-Carlo. Por lo tanto, es un no pero sí. No aparecerá en el reglamento, pero Jarmo ya ha dejado claro que no se permitirán ciertas cosas.
Vía | Autosport