Tras unos meses de silencio, los responsables del proyecto que pretende llevar a Canadá al calendario del Mundial de Rallyes han vuelto a publicar noticias durante la jornada de hoy. Y lo cierto es que han sido buenas nuevas las que han traído el RPAC (Rally Promoter Association of Canada), apuntando a que incluso el proyecto puede adelantares un año respecto a la fecha original que hablaba de 2023 como gran opción. Un año de trabajo en el que no solo se han informado de los requisitos necesarios para acoger una prueba del WRC, sino también en la búsqueda de ayudas públicas para poder llevar adelante esta oportunidad de volver a tener una cita norteamericana más allá de la ya tradicional presencia del Rally de México.
Estos meses también han servido para definir los objetivos de la prueba canadiense, el primero de ellos, que será una prueba invernal, a disputarse en condiciones de hielo y nieve y cerca de zonas con muchos habitantes, con opciones de alcanzar patrocinios con organismos y empresas de turismo locales y gran posibilidad de encontrar alojamiento para acoger a aficionados y miembros de los distintos equipos. También habría lugar para que los competidores nacionales tomen parte de la prueba, incluso aquellos que no disponen con vehículos homologados por la FIA (la gran mayoría), obviamente sin contar para la clasificación del WRC.
Concretando, el Rally de Canadá podría disputarse en 2022, a mediados del mes de febrero y tendría una base en Ottawa o Gatineau, dejando abierta la opción de celebrarse tramos tanto Quebec como en Ontario, así como una superespecial y la ceremonia de salida dentro de la región de la capital del país. “Una cosa que ha quedado clara para nosotros es que lo que parecía un sueño hace un año es ahora muy posible”… con esta frase seguro que ha recorrido un escalofrío por la espalda a los responsables del Rally de Suecia, ya que precisamente una cita de estas características dejaría en la cuerda floja a los escandinavos que no han gozado de regularidad organizativa durante los últimos años.
Nos han dicho que deberíamos esperar un compromiso de cuatro años y mientras nuestro objetivo original era tener nuestro primer evento en el WRC en 2023, la FIA quiere que miremos a 2022, proponiendo un evento candidato/observación a sólo dos años de distancia. Eso no es mucho tiempo, y hay mucho trabajo por hacer todavía. Las carreteras, los lugares, las superespeciales y las asociaciones de la comunidad que se unen… estamos seguros de eso. El mayor desafío será el desarrollo de las empresas que apoyen el presupuesto necesario para un acontecimiento de esta magnitud. Eso no será una tarea pequeña, pero creemos que esto es manejable, ya que la exposición que viene con el WRC será atractiva para muchos socios potenciales.