Acusada en muchas ocasiones por su inmovilismo, la Fórmula 1 puede estar frente a un movimiento casi sin precedentes. Mañana, durante la jornada del viernes del Gran Premio de Austria, los equipos, FIA y los responsables del campeonato se reunirán para discutir la posibilidad de regresar después del descanso de verano a la anterior estructura de los neumáticos Pirelli. Concretamente, fue Nikolas Tombazis el encargado de convocar este improvisado consejo tras el Gran Premio de Francia,
En comparación con la estructura utilizada en 2018, los neumáticos actuales incluyen una banda de rodadura más delgada de 0,4 mm, movimiento que ha ayudado mucho a Mercedes-AMG F1 a no volver a experimentar los problemas de sobrecalentamiento que ya tuvo en algunos grandes premios en la pasada campaña. En el paddock del Mundial de Fórmula 1 apuntan a que uno de los grandes motivos para el dominio de la firma de la estrella en las ocho carreras disputadas hasta el momento.
Según la prensa gala, si el 70% de los equipos o la FIA están de acuerdo con cambiar el producto los de Mario Isola podrían dar un paso atrás y regresar a las especificaciones anteriores de neumáticos. Si Mercedes-AMG F1 cuenta con los apoyos de sus clientes, Williams y Racing Point, tanto Ferrari como las otras dos escuderías de las bebidas energéticas y HAAS parecen decantarse por la opción de regresar a 2019. Falta por saber las posturas tanto de Renault, McLaren como de Alfa Romeo.
De llegar a contar con el apoyo de siete equipos, el cambio se podría producir de cara al Gran Premio de Bélgica, en lo que podría ser el remedio para una temporada completamente dominada hasta el momento por Mercedes, seguramente no en términos de rendimiento a una vuelta, pero sí complicándole la gestión del neumático.