La Fórmula 1 actual está marcada seriamente por unas duras restricciones en los monoplazas, ya sea de componentes de motor, de centralitas, baterías o incluso de límite de combustible. Sin embargo, el próximo 17 de abril habrá una reunión del grupo de Estrategia en París, en la que se podría acordar la desaparición de una de estas limitaciones de cara a la próxima temporada.
Serán diversos los temas que tratarán pero uno de ellos ha llamado especialmente la atención. La organización de la Fórmula 1 y los equipos estarían dispuestos a levantar el límite de combustible en carrera, que está fijado en 105 kg. En caso de que esta medida sea finalmente aceptada e integrada en el reglamento de 2019, el consumo de 100 kilos por hora seguiría estando presente.
Esta medida permitiría que los equipos tuvieran un margen mucho más amplio en la gestión de la estrategia y no tendrían que preocuparse con el ahorro de combustible con tal de llegar con un peso mínimo al final de carrera. Además, los pilotos no tendrían que utilizar la maniobra de «Lift & Coast», que consiste en dejar de acelerar varios metros antes del punto de frenada, permitiendo que el monoplaza fuera disminuyendo la velocidad por su propia inercia.
La eliminación de esta restricción de limitación de combustible, en caso de ser aceptada y confirmada se sumaría a la que aplicará el próximo año respecto al peso de los pilotos. En enero de 2018, el Grupo de Estrategia acordó que el peso mínimo de los pilotos será de 80 kilogramos, que permitiría a los pilotos competir en igualdad de condiciones y no penalizaría a los pilotos más altos de la parrilla.
En un momento en el que Liberty Media estaría barajando distintas opciones con tal de aumentar la espectacularidad de la Fórmula 1, esta medida ayudaría a que esto sea posible. Los pilotos irán al límite en todo momento y no tendrían que estar pendientes de otros factores. Faltará por ver si realmente estos cambios afectarán tal y como tiene la organización previsto a la categoría reina del automovilismo.
Vía| AMuS