Se acabó lo que se daba. Después de los test en el pasado Gran Premio de Gran Bretaña, de los que incluso Sebastian Vettel llegó a encontrarse mareado por la distorsión que provocaba el “Shield”, la cúpula que se esperaba que fuera introducida en 2018, finalmente el Grupo de Estrategia de la Fórmula 1 ha decidido por la opción del Halo. Este último estará instalado en los monoplazas de la próxima temporada, pasando a ser la opción más adecuada en términos generales.
Esto implica que los Fórmula 1 montarán dicho sistema ya en 2018 y puede que tanto la FIA, como los responsables de la seguridad del Gran Circo decidan desechar el resto de opciones y únicamente seguir trabajando en el Halo para seguir puliendo los detalles. En la reunión, a la que también asistieron representantes de Renault, Toro Rosso, Sauber y HAAS (además de los seis equipos habituales) las escuderías no expresaron su apoyo a un elemento que sin duda supondrá un gran impacto estético ahora que los monoplazas habían recuperado parte de su atractivo perdido durante los últimos años.
La FIA ha decidido imponerlo al considerarlo la mejor opción por delante del resto y espera seguir mejorándolo con la ayuda de las distintas formaciones participantes en el Mundial.