Semanas antes del tradicional Rugido de Daytona, la IMSA publicó las primeras tablas del Balance of Performance para todas las divisiones, tomando como principales referencias lo observado en Petit Le Mans. Para 2019 se ha estipulado que los DPi y los LMP2 compitan en clases distintas, razón por la cual se ha decidido aumentar la potencia y además reducir el peso de los DPi, así que serán más rápidos y ligeros, justamente lo que solicitaban los equipos participantes ya que les resultaba un tanto ilógico no poder exprimir al máximo la mecánica porque el campeonato perseguía una paridad con una división inferior.
El objetivo principal de la IMSA ahora será establecer dos niveles de rendimiento, uno para los DPi y otro diferente para los LMP2. En este caso, si se trata de la división superior, el RT24-P, el DPi de Mazda tendrá permitido elevar el régimen de revoluciones de su nuevo motor hasta 9300, conservando sus 905 kilos de peso total. Por su parte los prototipos Cadillac ajustarán sus motores V8 aspirados hasta alcanzar las 7600 rpm, con un peso total de 930 kilos, es decir 20 menos que en 2018. En cuanto a los V6 tanto de Nissan como de Acura, se indicó que ambos podrán girar hasta 7100 rpm, con la salvedad de que el prototipo Onroak pesará 935 kilos, 5 menos en comparación con esta temporada, y el ARX-05 tendrá un peso de 930 kilos, 10 menos con respecto a este año.
La mayor ganancia de potencia en este caso es para Mazda ya que su pequeño motor cuatro cilindros con turbo pasará de 8600 rpm a 9300. El V6 biturbo de Acura estaba en 5600 rpm y el Nissan en 5800, mientras el Cadillac es el que menos gana porque apenas pasará de 7500 a 7600 rpm. Se indicó además que los ajustes en la capacidad de carga y uso de combustible se realizará de acuerdo al desempeño porque se tendrían que evaluar las incidencias de los cambios con respecto a los resultados en las pistas. Lo que sí será obligatorio es el tiempo mínimo de repostaje que será de 30 segundos.
En cuanto a los LMP2, se informó que el motor V8 Gibson estará limitado hasta las 8250 rpm, cuando este año estuvo en 8750, además cada coche deberá pesar 940 kilos. Con estas reglas, es obvio que los LMP2 que se presenten a correr en la IMSA WeatherTech SportsCar Championship de 2019 no deberían ser candidatos a las victorias generales.
Vía | Motorsport Total