Según informes, se está evaluando una propuesta para incluir a la clase LMP3 en el Campeonato IMSA WeatherTech SportsCar, lo que crearía una tercera división de prototipos. La idea principal de la organización es atraer a algunos equipos que participan en la IMSA Prototype Challenge y con ello intentar reforzar la parrilla de la categoría de resistencia norteamericana ya que van al parecer se van a producir varias deserciones al finalizar esta temporada.
Los LMP3 son coches destinados a equipos privados con presupuestos limitados, y se pueden observar tanto en la IMSA Prototype Challenge como en la European Le Mans Series. Aunque todos utilizan los motores V8 Nissan de 5 litros y 450 caballos de potencia, en Europa se compite con la nueva generación de chasis, Ligier JS P320 y Duqueine M30–D08, mientras en los Estados Unidos se siguen utilizando los Norma M30 y los Ligier JS P3.
Se especula que de ser aprobados los LMP3 en el Campeonato IMSA WeatherTech SportsCar se utilizarán modelos de nueva generación, tal rumor surge porque Ligier Automotive división Norteamérica ha estado probando un JS P320, con la versión más potente del motor Nissan, en el circuito de Motorsports Park, con miras a convencer a potenciales clientes. También es posible que si la IMSA permite a los LMP3 participar en su categoría principal, los proveedores Ginetta, Duqueine Automotive y ADESS presenten alguna propuesta ya que poseen licencias otorgadas por el ACO para fabricar LMP3.
El mayor problema del traslado de los LMP3, del Prototype Challenge al WeatherTech SportsCar, es el presupuesto porque la inversión a realizar se va a duplicar, pero ello no va a incidir en el rendimiento del coche. También está la posibilidad de que tanto equipos como pilotos rechacen, en su mayoría, competir en la categoría superior porque donde están ahora se divierten sin mayor presión, inclusive hay pilotos mayores de 50 años a los que no les interesa participar en eventos tan exigentes donde además se debe gastar mucho dinero, justamente lo contrario a la filosofía del LMP3.
Aproximadamente, disputar una temporada en la clase LMP2 en la IMSA WeatherTech SportsCar cuesta un millón y medio de dólares, cifra que más o menos también representa lo que debe aportar cada interesado en competir con un LMP3. Tal aspecto no resulta atractivo, de allí que se sugiera un estudio de factibilidad antes de implementar una medida desesperada para intentar rellenar la parrilla.
Vía | Sportcars365