Tras culminar las 6 Horas de Indianápolis, la IMSA procedió a incautar siete prototipos de la clase GTP para realizar una exhaustiva inspección técnica con el objetivo de garantizar que todos cumplen con la normativa vigente. El proceso incluye escaneo 3D de las carrocerías para determinar con precisión sus dimensiones, verificación de los números de las piezas, revisión del tren motriz y de cualquier otro elemento que esté sujeto a homologación, tales como el piso, los frenos, la refrigeración, la electrónica y la suspensión.
Los prototipos confiscados son: el BMW M Hybrid V8 número 24, justamente el ganador en Indianápolis, el Porsche 963 número 6, el Porsche 963 número 85, el Acura ARX-06 número 40, el Porsche 963 número 5, el Cadillac V-Series.R número 01 y el Lamborghini SC63 número 63. Esta muestra representativa permanecerá resguardada mientras el personal, encabezado por Eric Haverson, director de cumplimiento técnico y escrutinio de la IMSA, Simon Hodgson, vicepresidente sénior de competición y Matt Kurdock, director técnico sénior, proceden a revisar y evaluar a profundidad, antes de que los coches participen en Petit Le Mans, el cierre de la temporada que define a los campeones entre los pilotos, equipos y fabricantes.
De presentarse alguna duda o inconveniente con un prototipo, el mismo sería enviado hasta el Centro de Investigación y Desarrollo de la NASCAR ubicado en Carolina del Norte, donde también se encuentra el túnel de viento de Windshear, para confirmar o descartar las posibles irregularidades. La revisión también va a contribuir a establecer nuevos parámetros para garantizar la paridad entre los involucrados, con ello se persigue que todos los fabricantes estén en un rango equitativo que promueva un mayor espectáculo en pista.
Periódicamente, como después de las 24 Horas de Daytona en enero, la IMSA realiza inspecciones técnicas extendidas para garantizar el cumplimiento de las reglas. Los resultados de las carreras seguirán siendo provisionales hasta que se completen estas inspecciones. La IMSA se compromete a brindar buenas carreras para los fanáticos y un campo de juego justo y parejo para los fabricantes.