En el paddock de la IndyCar se está corriendo el rumor de que Honda tendría un pie afuera de la serie, tal como los mismos japoneses han insinuado argumentando exceso de gastos en su departamento de competición, inclusive se asomó la posibilidad de que HRC se traslade a la NASCAR para mantener visibilidad en el mercado estadounidense. Lo cierto es que tanto Honda como Chevrolet tienen contrato vigente hasta 2026 y se entiende que Chevrolet, al estar afiliado a Team Penske, continuará en el nuevo ciclo de motores. Pero ante las incertidumbres, la IndyCar ha iniciado conversaciones con otros proveedores interesados en ingresar al campeonato.
La fórmula del V6 biturbo de 2.2 litros llegará a su final en el 2026, tras catorce temporadas vigente, lo que significará un gran cambio para la serie. Si bien se espera que a partir del mes de julio inicie la era híbrida, la categoría apunta hacia una nueva generación de motor térmico más moderno y eficiente. Desde finales del año pasado se viene rumorando que Hyundai y Toyota están explorando opciones para estar en la IndyCar, pero el detalle está en una posible deserción de Honda puesto que en el campeonato participan 27 monoplazas de tiempo completo, alrededor de 36 para las 500 Millas de Indianápolis, así que una división equitativa resultará en una presión financiera y logística que seguramente creará dudas en los interesados.
En tal sentido, la IndyCar deberá proponer una fórmula de ICE+ERS atractiva en todos los sentidos, contemplando un bajo costo de producción y el uso de componentes comunes, tal como exigió Honda para mantenerse en el campeonato a largo plazo. Un ERS más potente y mantener el uso de combustibles renovables también estarían entre las condiciones. Toda vez que se establezca un compromiso en cuanto a las especificaciones del nuevo motor, el próximo paso será actualizar la tecnología y presentar un nuevo chasis para al fin reemplazar al Dallara DW12.
En palabras de Mark Miles, director ejecutivo de Penske Entertainment:
Todavía no se ha tomado ninguna decisión, sin embargo, hay conversaciones en curso con nuestros fabricantes y otros posibles fabricantes y han sido realmente constructivas, pero no se centran simplemente en un enfoque de lo que apuntamos para 2027 con cualquier cambio que podamos hacer con respecto al sistema de energía y el chasis.
Vía RACER