“Creo que ya he llegado al límite de mis capacidades en un 2RM, mi pilotaje se adapta más al de un tracción total”. Esto es lo que apuntaba Oliver Solberg hace solo unas semanas cuando se le preguntó acercad de sus planes para 2019. El ganador del RallyX Nordic debía decidir si tomar la vía de los rallyes o seguir combinando sus participaciones al volante de un Supercar con su aprendizaje de la disciplina que coronó a su padre como Campeón del Mundo en 2003. La decisión de este joven de 17 años parece que apunta a ir haciendo una entrada gradual en el WRC, comenzando por una campaña, la que acaba de empezar, que se desarrollará a medio camino entre Estonia y Letonia, con “algunas sorpresas” que dan a entender que un anuncio acerca de su primera incursión en el WRC2 no parece muy lejano.
Sin embargo, este fin de semana será sin duda un recuerdo especial para Oliver, no solo por su debut al volante del Volkswagen Polo GTI R5 familiar en el Rally Aluksne, además del estreno de su copiloto, Aaron Johnson. Este sábado 19 de enero de 2019 será recordado por Oliver como su primera victoria absoluta en un rally, disputándose en este caso el triunfo con un viejo conocido del Mundial de Rallyes, Valeriy Gorban, el cual volvía a emplear en esta ocasión el MINI JCW WRC con el que disputó el campeonato intercontinental en 2016.
Tras un inicio espectacular por parte del ucraniano, Oliver se pondría al frente de la general apenas en el sexto tramo, únicamente lamentando un par de pequeños errores, una pequeña salida a la cuneta en el TC4 y una calada, algo que no le impidieron vencer con cierta solvencia y 16 segundos de ventaja en esta cita letona disputada en condiciones invernales. Tres scratchs consecutivos dejaron la impronta del piloto nórdico a pesar de solo llevar unos cuantos kilómetros de test con la unidad comprada por su padre tras el Rally de Catalunya 2018. Lukasz Habaj completaría el podio, en este caso con un Skoda Fabia R5. Con 17 años, el siguiente paso de Oliver será el de poder dar un trago al champán de la victoria, algo que llegará el 23 de septiembre. Por ahora, el lobezno (animal con el que ha querido relacionar su imagen en las carreras) ha conseguido ya su primera sangre, veremos cuál es la segunda.
Aaron y yo teníamos un plan el viernes por la noche, queríamos tomarnos un poco de tiempo y simplemente participar en el evento. Me encanta pilotar en la oscuridad, con las luces y la nieve, es genial, pero también es un poco diferente. ¡Está oscuro! Si te sales o si sucede algo fuera de lo común, no siempre puede ver de inmediato dónde está todo, especialmente cuando todavía estás conociendo un coche nuevo – Oliver Solberg