Aunque Guanyu Zhou mantiene la esperanza de seguir en la Fórmula 1 el año que viene, entiende que dos factores atentan contra sus posibilidades. El primero es la salida de Alfa Romeo del equipo, el fabricante italiano propició su fichaje como piloto titular para aumentar sus ventas en el mercado chino, y el otro es que el francés Théo Pourchaire, miembro de la Academia Sauber, actualmente lidera el campeonato de Fórmula 2 y su desembarco en la Fórmula 1 luce inminente. A estas alturas del año, desde la escudería suiza no han mostrado interés en extender el contrato de Zhou, situación que mantiene al piloto en la búsqueda de otras alternativas.
Zhou comprende que el mercado de pilotos para el 2023 luce muy complicado para sus opciones puesto que la mayor parte de la actual parrilla finaliza contrato en 2024 y para entonces deberá estar a la vista de todos para ser tomado en cuenta. Si bien en pista su rendimiento y consistencia han aumentado hasta el punto de poder compararse con Valtteri Bottas, lo cierto es que Sauber y Audi están en la búsqueda de una atractiva alineación de pilotos para competir a partir de 2026 y la de este año no parece la más adecuada para representar al fabricante alemán, toda vez que Bottas rondará los 36 años para entonces.
Para Sauber también resultaría contraproducente postergar el ascenso de Pourchaire, quien el año pasado alcanzó el subcampeonato de la Fórmula 2, porque el francés ha cumplido con todas las tareas que le han exigido desde que firmó con el programa de desarrollo en el año 2019. Ante lo que pueda ocurrir, el propio Zhou comunicó que intentará mantener la calma, alejando pensamientos negativos en lo que resta de temporada para de esta forma concentrar sus esfuerzos en mejorar su desempeño. También es de hacer notar que la posición de Zhou no luce tan sólida porque Sauber esperaba el respaldo de inversionistas y patrocinadores chinos tras su fichaje y la hipotética inyección de capital proveniente de Asia todavía no se ha presentado.
En palabras de Guanyu Zhou:
Estamos muy abiertos a todo para el próximo año y yo mismo preferiría quedarme aquí [en Sauber]. Aunque no será Alfa Romeo el próximo año, el equipo se convertirá en una escudería de fábrica a partir de 2026 y creo que es muy importante para mí estar aquí. Tal vez se presenten opciones durante este período porque habrán muchos cambios en el mercado de pilotos. El año pasado podría haber estado más preocupado por el asiento, aunque no hay nada confirmado en lo que va de año y no he firmado nada relacionado con el futuro, paso a paso, todo marcha según lo previsto.
Vía RACER