Antes de que la propuesta Temerario GT3 entre en escena el año que viene, Lamborghini Squadra Corse implementará una serie de medidas, siendo una de ellas seleccionar cuidadosamente a sus primeros clientes y entre ellos establecer una sociedad con uno para conceder mayores privilegios y de esta forma operar de la misma forma como lo hace Ford con Multimatic, Chevrolet con Pratt Miller, Ferrari con AF Corse y Porsche con Manthey. Explicó Rouven Mohr, director técnico de Lamborghini, que el cambio de filosofía es casi obligatorio para Squadra Corse porque la clase GT3 tomó una nueva dirección y ellos como fabricantes no deben permanecer rezagados.
Es obvio que la nueva gerencia de Maurizio Leschiutta al frente de Squadra Corse apunta hacia cambios significativos en vista de todo el terreno que ha perdido Lamborghini a nivel deportivo. Sin presencia en el WEC y dejados de lado por Iron Lynx, para unirse a Mercedes AMG, la imagen del fabricante se viene desmoronando porque en gran parte la apuesta por el prototipo SC63 ha salido muy mal y el Huracán GT3 Evo 2 no luce como un rival de consideración en la actualidad debido a su antigüedad. Ante lo que está ocurriendo, Leschiutta ha decidido implementar medidas radicales, siendo una de ellas elegir a una estructura privada que pase a ser el estandarte de Squadra Corse debido a que la división deportiva de Lamborghini no tiene planes para operar como un equipo de fábrica.
Regresar al WEC sigue siendo un objetivo claro, sin embargo, es casi imposible inscribirse en la clase LMGT3 cuando no cumplen los requisitos para competir en la clase Hypercar. Ante esta disyuntiva, el único camino lógico es que el Temerario GT3 represente una gran opción para captar clientes interesantes para de esta forma aumentar el nivel de soporte técnico para aquel que demuestre la mayor ambición y el mejor rendimiento en las series más competitivas. Si bien desde hace varios años mantiene estrecha relación con Grasser Racing Team, la estructura austriaca no ha mostrado deseos de expandirse y sus demostraciones en el DTM han sido mediocres en comparación con SSR Performance, equipo que impulsó a Mirko Bortolotti hasta el título de pilotos el año pasado.
Así que en Lamborghini Squadra Corse tendrán mucho trabajo este año porque deben convencer a equipos sólidos para que se hagan cargo del SC63 y del Temerario GT3 en el futuro, además de seleccionar a sus clientes porque a partir de ahora apuntarán más hacia la calidad y no a la cantidad, lo que justamente les tiene en tan difícil situación. La reciente experiencia junto a Iron Lynx dejó muy mal a Squadra Corse porque desde el equipo italiano manifestaron que el fabricante solamente les entregaba los coches mientras ellos deben afrontar los gastos de desarrollo y logística para competir, lo que resultó en una excesiva inversión que se tradujo en grandes pérdidas, sobre todo en lo que respecta a encargarse del SC63. Ahora Lamborghini debe cambiar esa mala imagen y ofrecer su programa Temerario GT3 como una opción atractiva en todos los sentidos, únicamente así podrán llamar la atención de un equipo dispuesto a representar a Lamborghini en los mejores eventos del deporte motor.
En palabras de Rouven Mohr:
Si somos competitivos, entonces encontraremos un equipo que esté interesado, aunque en GT3 hemos cambiado nuestra filosofía. En el futuro queremos concentrarnos un poco más en equipos muy orientados al rendimiento, donde la ambición coincide también con las nuestras. Menos, en este caso, es más. En el pasado, éramos un poco más abiertos, pero para el futuro, especialmente en GT3, vemos que el nivel es muy, muy competitivo y por tal razón queremos concentrar nuestro máximo apoyo a menos equipos que en el pasado.
Vía Sportscar365
