Ahora que el Mundial de Rallyes ya mira oficialmente hacia lo que serán sus primeros coches híbridos, los cuales deberían llegar de cara a la temporada 2022, es un buen momento para recordar a aquellos visionarios que confiaron hace más de una década en este tipo de tecnología de propulsión como el futuro a largo plazo para la disciplina. No era sencillo, especialmente si tenemos en cuenta que este tipo de sistemas apenas se habían dejado ver en la Fórmula 1 y el Mundial de Resistencia, sin embargo, con la paulatina desaparición de los LMP1-H debido a los altos costes, la Fórmula 1 comenzaba a quedarse sola en esta apuesta. Al menos en los últimos meses esta situación comenzó a cambiar, con ‘series nacionales’ como el BTCC o el DTM empezando a apuntar hacia esta opción.
En el pasado ya hemos hablado del que se puede considerar como el primer World Rally Car híbrido de la historia, con aquella propuesta lanzada por Citroën Racing a finales de la primera década del Siglo XXI que se bautizó con el nombre de “Citroën C4 WRC HYmotion4”. Probado por Dani Sordo y Sébastien Loeb, era una clara apuesta por parte de la firma de los dos chevrones con unos sistemas que tardarían en llegar a sus vehículos de calle, aún más para poder ver el borrador de algo parecido en competición.
Sin embargo, por aquel entonces en Italia también se estaba trabajando en un proyecto híbrido con alma de rallyes. En la cabeza del soñador Beppe Volta estaba la de tratar de unir dos de sus pasiones: la evolución técnica y su querida Lancia. El ya desaparecido empresario italiano, fallecido en 2017 tras un desafortunado accidente, fue responsable de restaurar el afamado y casi nonato Lancia Delta ECV1, lo que le animó a seguir explorando nuevos proyectos, entre los que se situaba precisamente este Lancia 037 4WD-H, lo que podemos afirmar que sería el resultado de la unión entre los Grupo B y la tecnología híbrida.
¿Cómo se puede hacer un híbrido manteniendo la esencia Gr.B?
En su creación participaron otros grandes expertos en la materia, como el Ing. Claudio Lombardi (Director técnico y Director General de Lancia y Abarth Racing en la década de los ochenta), o el Prof. Stefano Carabelli, el cual sería el encargado de mostrar los pasos para que el 037 pudiera equipar de forma eficiente un motor eléctrico. ¿Quién iba a pensar que el último coche de tracción trasera capaz de ganar el Campeonato del Mundo de Rallyes podría dar el salto y convertirse en un híbrido con tracción total permanente?
La imagen no cambiaba, el Rally 037 era posiblemente uno de los más adecuados a la hora de poder amoldarse a estas nuevas características, especialmente porque en el subchasis frontal se podía rediseñar y suprimir el neumático de repuesto y alojar en el eje delantero un motor eléctrico, un diferencial, la unidad de control y la batería. Había que elegir cuál era la solución más adecuada para el Gr.B, valorando si convenía adoptar uno de los sistemas habituales que se pueden ver en los vehículos de calle o si se optaba por algo muy similar a lo que pusieron en práctica los prototipos de Le Mans.
El Lancia Rally 037 4WD-H y su segunda fase:
Finalmente sería esta última la opción más plausible, permitiendo que el motor de combustión montado en la zona central siguiera siendo el principal protagonista, aunque en este caso asociado al motor eléctrico situado en el eje delantero que le daría tracción total. El grupo de trabajo encabezado por Volta quiso tener todo en cuenta, y si el disponer de dicha tracción en circuitos puede ser de gran ayuda, especialmente a la hora de acelerar en las curvas más lentas o en condiciones de bajo grip, en los rallyes no se podía optar por tener un sistema con dicha intermitencia.
Todo se centró en dos fases. La primera, la cual comenzó en 2012, fue la de crear un sistema independiente en el eje delantero que permitiera la introducción de un motor eléctrico de 90 kW, una caja de cambios y un diferencial y reglar la unidad de control para que, en función del uso de los pedales de freno y acelerador, del régimen del motor de combustión y del ángulo de la dirección se pudiera regular para que entregara la potencia de forma homogénea y sin provocar un comportamiento irregular respecto al empuje de la zaga. La parte negativa de este primer paso es que la tracción permanente 4WD únicamente estaría disponible mientras que la batería tuviera energía, por lo que había que optar por reformular dicha opción en un segundo paso.
Solo unos meses más tarde se anunciaría que RGM pasaba también a estar involucrado en el proyecto, con la intención de suministrar un convertidor modular múltiple con el fin de introducir un segundo e-motor que permitiera al conjunto cargar la batería a través del térmico dependiendo del grado de exigencia (condiciones de operación) y del estado de la carga de la batería. Nunca se llegaron a dar datos oficiales, pero el proyecto siguió activo hasta el fallecimiento de Volta en 2017, cuando las actualizaciones fueron reduciéndose, antes de que en 2018 recibimos las últimas imágenes de su estado, luciendo en este caso de un nuevo alerón trasero. Después de eso, tan solo la página de Facebook permanece abierta, mientras que el dominio del proyecto haya sido comprado por una empresa china que nada tiene que ver con el Lancia Rally 037 4WD-Hybrid.
