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Lando Norris asusta y se impone en Singapur antes del parón otoñal de la Fórmula 1

Extraño Gran Premio de Singapur en 2024, primero en toda la historia de la carrera sin la intervención del coche de seguridad. Si bien hubo acción sobre el asfalto de Marina Bay, ningún piloto se pasó demasiado del límite aunque algunos lo tocaron. Lando Norris fue uno de los buscadores de límites y ganó con suficiencia en un domingo imbatible para McLaren. Max Verstappen se coló entre los coches de Woking y sacó un segundo puesto que puede valer su peso en oro, completando Oscar Piastri el podio.

Todos los pilotos empezaban con neumáticos medios menos Lewis Hamilton y Daniel Ricciardo con blandos y Kevin Magnussen, Lance Stroll y los Sauber con duros. Norris aguantó la pole position y Verstappen tuvo que defenderse de Hamilton, permitiendo que el de McLaren se intentase escapar. Fernando Alonso y Charles Leclerc se saltaron la primera curva y Alex Albon perdió cinco posiciones para evitar chocar con Franco Colapinto, que se tiró al límite y le pasó a él, a Carlos Sainz y a Yuki Tsunoda.

Nico Hülkenberg cerró a Alonso y atacó al mismo tiempo a Piastri, entorpecido por George Russell en esos primeros metros. El australiano superaría al alemán en la curva 7 y escoltó a los Mercedes mientras por arriba Norris iba marcando vueltas rápidas, llegando a rodar un segundo más rápido que los demás pilotos en su fuga respecto a Verstappen. Hülkenberg taponó a Alonso y Leclerc por el sexto puesto, Colapinto mantenía a raya a Sergio Pérez por la novena y Tsunoda le guardaba la 11ª a Sainz.

Ricciardo entró en la décima vuelta para quitarse los blandos y Albon cambió de medios a duros en la 11ª para desencallarse del pelotón. Sainz entró en la 13ª en buscar del undercut con Tsunoda y salió justo por delante de Albon, con quien empezó a rodar hasta dos segundos más rápido que el resto de la parrilla. Sin embargo el tailandés sufrió problemas de sobrecalentamiento y se retiró en la vuelta 15. Hamilton cambió de gomas blandas a duras en el 17º giro y salió en medio de un grupo separado al que adelantó sin dificultades, igual que hizo Sainz con Valtteri Bottas y Guanyu Zhou.

El ritmo de Norris era insultantemente veloz y le permitía alcanzar un margen de 20 segundos con Verstappen. Leclerc se impacientó detrás de Alonso y Hülkenberg pero el español fue a boxes en la vuelta 25 para montar duros, hecho que el monegasco aprovechó para lanzar un interior atrevido al alemán en la curva 17 y relegar al Haas. Hamilton se impacientaba aún más tras Tsunoda y se fue largo en la misma curva cuando intentó superar al japonés. Russell paró en la vuelta 27 y salió delante de su crítico compañero de equipo.

Verstappen paró en la vuelta 29 y salió un pelo por detrás de Leclerc, entrando Hülkenberg y Colapinto a la vez que el neerlandés. Norris se pasó de frenada, tocó levemente el muro de la curva 15 y aun así cubrió la detención de Verstappen. El inglés salió tan holgado que se mantuvo líder por delante de Piastri, que no había parado. Tsunoda paró en la vuelta 33 y se quitó de la zona de puntos, donde figuraban los Ferrari con estrategia alternativa y Leclerc aguantando a Russell por el cuarto lugar.

Finalmente Leclerc cambió ruedas en la vuelta 36 y regresó al asfalto octavo por delante de Hülkenberg y detrás de Sainz y Alonso. Piastri completó la ventana de paradas obligatorias en el 38º giro y salió pegado a los Mercedes con un neumático mucho más fresco. El australiano pasó a Hamilton en la vuelta 40 y Leclerc realizó lo propio con Alonso para alternarse ambos pilotos la vuelta rápida. Piastri dejó atrás a Russell con igual facilidad y se situó en podio con ayuda del DRS de la recta trasera.

Alonso llevaba consigo la parte final de la zona de puntos, que perseguían Hülkenberg, Pérez y Colapinto. Norris rozó otra pared de camino a la vuelta rápida de una carrera tranquila para lo que suele ser Singapur y acabó recibiendo instrucciones crípticas como “bebe agua” para indicarle que se relajase. Kevin Magnussen chocó en la curva 5 y pinchó la rueda trasera izquierda, lo más cercano a un Safety Car que tuvo este Gran Premio histórico por su calma en un circuito de habitual locura.

Leclerc mostró el ritmo rápido del Ferrari en la parte final, adelantando a Hamilton en la vuelta 50 y presionó a Russell en los últimos giros sin éxito, finalizando quinto sin opciones a más después de un buen ascenso. Norris dio otro susto al irse largo doblando a Colapinto, advirtiéndole McLaren por radio de los efectos del aire sucio para calmarle y consolidar su posición. Magnussen abandonó con daños y Ricciardo se dio el lujo de marcar la vuelta rápida en la que podría ser su última carrera en Fórmula 1.

Norris se impuso de forma autoritaria y metiendo miedo, seguido lejos por Verstappen y Piastri. Russell resistió a Leclerc por la cuarta posición, puntuando Hamilton, Sainz, Alonso (ya doblado), Hülkenberg y Pérez. Colapinto rozó otro milagro y llegó a meta junto a Tsunoda, Esteban Ocon, Stroll, Zhou, Bottas, Pierre Gasly y Ricciardo. Magnussen y Albon fueron los únicos retirados del caluroso y agotador evento.

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Héctor Sagués

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