Menudo carrusel de noticias de IndyCar en un solo día. Aunque la gran nueva para los hispanohablantes como nosotros es el desembarco de Agustín Canapino a tiempo completo, los focos allá se los lleva sin duda McLaren tras cerrar el sueño húmedo de buena parte de los aficionados al motor en Estados Unidos: en 2024 se volverá a producir un ‘Double Duty’ (Indy 500 y Coca Cola 600 por parte de un mismo piloto el mismo día) y lo hará ni más ni menos que Kyle Larson, campeón de la NASCAR Cup Series en 2021.
El californiano, medio resarcido ya de la polémica racista que a punto estuvo de mandar su carrera deportiva al garete en pleno confinamiento, llevaba meses coqueteando con la posibilidad de disputar las 500 Millas de Indianápolis este mismo año. Finalmente queda todo pospuesto pero confirmado para 2024 tal y como anunciaron hoy McLaren y Hendrick Motorsports, su equipo en NASCAR.
Zak Brown regala así una nueva bomba mediática a la IndyCar Series, permitiendo que uno de los nombres más reconocidos del automovilismo estadounidense dispute las 500 Millas de Indianápolis (siguiendo la estela de Tony Stewart, Robby Gordon o Kurt Busch) y lo haga además trayéndose consigo a un propietario de equipo de leyenda como Rick Hendrick.
Hay que recordar que desde esta temporada McLaren alineará cuatro coches en Indianápolis, siendo con toda probabilidad el que pilotará Tony Kanaan en la edición 2023 el destinado ser heredado por Larson doce meses más tarde.
Foto | Hendrick Motorsports
