Si ya estaba claro que este año 2019 íbamos a presenciar una lucha encarnizada por meterse en la parrilla de las 500 Millas de Indianápolis (en apenas dos días hemos tenido la confirmación de otros dos participantes, Pippa Mann con Clauson-Marshall Racing y Sage Karam con Dreyer & Reinbold) al contar con bastantes más que 33 inscritos, la IndyCar Series le ha dado aún una vuelta más de tuerca a su clasificación con un apasionante formato para la jornada de domingo.
Si el año pasado vimos un mini-Bump Day marcado por la lluvia que dejó fuera a James Hinchcliffe y Pippa Mann el sábado y luego un domingo en el que quedaron definidos por un lado los nueve primeros puestos y por otro el resto, en esta ocasión la jornada de sábado determinará directamente los puestos del 10º al 30º, dejando para la jornada de domingo tanto el drama de quién se quedará fuera de la gran carrera como la lucha por la pole.
Así, la idea es que durante una hora todo aquel que no lograra entrar entre los 30 primeros el sábado disponga de un único intento para colarse en la parrilla. Y una vez quede claro quiénes estarán y quiénes no una semana más tarde en carrera, se celebrará el Fast Nine con el que determinar la pole. Un movimiento acertado y encaminado a que la televisión norteamericana cubra ambas luchas como es debido.
Foto | IndyCar Series