Lewis Hamilton da la bienvenida al verano con una nueva victoria en el Gran Premio de Francia

Le Castellet ha sido testigo hoy de una nueva victoria para Mercedes-AMG F1 en la octava cita de un Mundial de Fórmula 1 que no conoce otro color que no sea el plateado de la firma de la estrella que ha vuelto a la senda de los doblete y que aumenta aún más su ventaja al frente de las dos clasificaciones del campeonato intercontinental. La ronda francesa ha seguido el guion que se esperaba, aunque el final ha estado muy cerca de ser un giro argumental que nos hubiera dejado un sabor mucho más dulce después de la que ha sido una de esas pegajosas tardes de verano.

Salida muy limpia en el pelotón, con Sainz llegando incluso a cuestionarle la posición a un Max Verstappen que utilizaba a Leclerc como pantalla para defender la cuarta plaza y además intentar atacar al monegasco después de que Charles Leclerc también se viera frenado por Valtteri Bottas. El de Ferrari aguantaba el tercer escalón del podio provisional, con Verstappen atosigado por Carlos hasta que en el segundo giro el piloto neerlandés ya era capaz de poner tierra de por medio sobre el madrileño.

Por detrás tanto Pierre Gasly como Antonio Giovinazzi empezaban a sufrir con los neumáticos más blandos desde muy pronto (el italiano pararía muy pronto para poner el compuesto más duro), mientras que Daniel Ricciardo cedía posiciones y Sergio Pérez se iría largo por las escapatorias, sacando ventaja y adelantando a uno de los HAAS, lo que le supondría una penalización de 5 segundos al mexicano.

Con las posiciones estabilizadas por delante, quedaba por ver si Sebastian Vettel sería capaz de desembarazarse rápidamente de los pilotos que le precedían, con los McLaren mostrando una gran velocidad punta, pero con el germano consiguiendo superar a ambos sin demasiadas complicaciones. Se situaba entonces tras Max Verstappen, con la estrategia entonces de ponerse a una distancia inferior de dos segundos para tratar de realizarle el undercut en la primera parada, algo a lo que no había opción después de que en Red Bull decidieran meter a su piloto cuando Ferrari realizó el primer amago.

El tetracampeón se quedaba en pista tratando de hacer la estrategia contraria, sin embargo, un bloqueo en una de las frenadas dejaba muy dañado uno de los neumáticos delanteros, lo que obligaba a poner fin al overcut y parar en boxes sin la meta conseguida de haber superado a Max. Sin abandonos ni problemas mecánicos en la primera mitad del Gran Premio, las batallas entre compañeros de equipo pondrían salsa a la carrera, con Kubica abriendo la trazada para defender la posición sobre George Russell (las inmensas escapatorias de Paul Ricard no traerían más problemas para el británico) y con Lando Norris exigiendo vuelta tras vuelta que Carlos Sainz Jr. endureciera su ritmo para no ser cazado por detrás.

Precisamente el rookie de los de Wooking sería uno de los más activos en radio, especialmente después de que en el equipo detectaran un problema hidráulico en el McLaren. Lejos de poder atacar la posición de Carlos Sainz Jr., Lando tendría que cambiar el estilo de conducción después de que desde el muro le informaran que no podía emplear el DRS, notando que las marchas serían más “agresivas”, que la dirección iba a ser mucho más pesada y que el coche iba a ser más inestable por el diferencial. Había que empezar a mirar los retrovisores con la llegada por detrás de Daniel Ricciardo, Kimi Räikkönen y un Nico Hülkenberg que tampoco podía superar por estrategia al finlandés.

Por delante, mientras que los Mercedes empezaban a sufrir algo de blistering en el tren delantero, Max Verstappen empezaba a sufrir una sangría de tiempo y en Ferrari establecían una estrategia para asaltar el punto de la vuelta rápida al final. Leclerc llegaba empujando a un Valtteri Bottas que se defendía con uñas y dientes, mientras que Lewis Hamilton conseguía su 79ª victoria en el Mundial de Fórmula 1, la sexta de la temporada y la cuarta consecutiva.

Por detrás, Verstappen se quedaba con la cuarta plaza, seguido de Sebastian Vettel y una gran actuación de Carlos Sainz Jr. que terminaba sexto después una carrera muy silenciosa. Lando Norris cedía posiciones, aunque Daniel Ricciardo podría ser sancionado por haber sacado ventaja del exterior del circuito, aunque para entonces, el británico también había sido superado en la recta Mistral por Räikkönen y el propio Nico Hülkenberg. Décima posición después del sufrimiento que puede ser novena si finalmente el australiano es sancionado con cinco segundos.

Clasificación final del Gran Premio de Francia 2019