Lewis Hamilton y Mercedes arruinan la fiesta a Ferrari en el Gran Premio de Italia

Pocos, entre esa marabunta de más de 100.000 aficionados que se encontraban en las gradas del Circuito de Monza podrían esperar un desenlace tan amargo para la escudería italiana durante el día de hoy, menos después de la emocionante interpretación del himno por parte del cantante Al Bano. Lewis Hamilton y Mercedes AMG F1 estaban listos para aguar la fiesta de los transalpinos y lo consiguieron después de que Vettel errara en la primera vuelta y de que Kimi no pudiera frenar al británico para volver a la victoria después de más de cinco años desde aquel triunfo cosechado en el GP de Australia 2013 con Lotus. Hoy fue el Hamilton de las mejores citas.

Sería una salida muy apretada. Los dos Ferrari llegaban a la frenada emparejada, sin darle espacio a un Lewis Hamilton que debería guardarse su ataque para la siguiente frenada. Kimi salía por delante de un Vettel que sería presa fácil de la velocidad del W09. El británico le hacía un exterior en la entrada a la chicane Della Roggia, momento en el que el alemán se encontraba con el Mercedes en el interior de la segunda fase de la variante y en el que se producía el choque que llevaba al líder del Mundial a cometer un trompo y quedar relegado a las últimas posiciones.

Tan sólo Brendon Hartley tenía una peor salida, después de llegar ya a la primera curva con el monoplaza completamente dañado y obligando a tomar el camino a boxes. La gran cantidad de suciedad y restos de pieza en pista obligaban a desplegar el Coche de Seguridad mientras que Hülkenberg, Ericsson, Ricciardo y Vettel entraban a boxes, este último para sustituir el alerón delantero. Por detrás los dos españoles se metían en posiciones de puntos, aunque Carlos Sainz con una salida de pista en la cuarta vuelta y Fernando Alonso irían cediendo posiciones poco a poco con el paso de las primeras vueltas.

Por delante, ya con Sebastian Vettel intentando completar una remontada similar a la del Gran Premio de Francia, Lewis Hamilton atacaba a Kimi Räikkönen y conseguía completar el adelantamiento en la frenada de la primera curva, aunque el Campeón del Mundo de 2007 no tardaría en devolvérsela, en este caso también en la chicane Della Roggia, lugar muy propicio para los adelantamientos. Por detrás, había mucho baile de posiciones, con los Force India aprovechando la velocidad del motor Mercedes para recuperar posiciones, mientras que Ricciardo y Hülkenberg tenían su particular batalla hundidos en la general, batalla a la que rápidamente se sumaría Sebastian Vettel.

Por su parte, Fernando Alonso no superaba las 10 vueltas antes de tener que abandonar por sexta vez esta temporada, en este caso por una avería en el McLaren. Después de haber hecho algo de tapón con el propio Pérez y Charles Leclerc. El asturiano confirmaba por radio que estaba sufriendo el mismo problema eléctrico, la tercera retirada en los últimos cuatro Grandes Premios y justo una semana después de quedarse a las primeras de cambio fuera del Gran Premio de Bélgica por el accidente en la salida. Tampoco Daniel Ricciardo podría terminar la carrera como demostraba la gran humareda blanca que salía de su Red Bull después de romper motor cuando la carrera no había llegado ni tan siquiera al ecuador.

Valtteri Bottas se ponía el traje de gregario en la parte final de la carrera, aguantando a un Kimi Räikkönen que adelantaba su parada en boxes siete vueltas respecto al cambio de neumáticos de Hamilton. El finlandés tapaba huecos para frenar al de Ferrari y permitir así que la llegada de su compañero en Mercedes AMG F1 no fuera tan costosa. No tardaría Kimi en empezar a notar que su neumático trasero izquierdo empezaba a caer rápidamente, momento en el que un Bottas que estaba sacando algunas décimas a su compatriota decidía entrar en boxes para así no perder su duelo frente a Max Verstappen. Trabajo de equipo completado.

A partir de ese momento Lewis Hamilton sólo tuvo que esperar su oportunidad para adelantar a Kimi Räikkönen con el menor riesgo posible, algo que llegaría ya en las últimas vueltas y que daría al británico su sexta victoria de la temporada y le devolvería al liderato. Era inevitable quedarse con la sensación de que la Scuderia Ferrari había vuelto a dejar escapar una oportunidad de oro, en este caso con el único consuelo de haber terminado segundo y que Bottas finalmente no pudo ser más que cuarto después de la gran actuación de Verstappen, de nuevo siendo el único que podía representar a la escudería de las bebidas energéticas hasta el final. La sanción de cinco segundos al holandés abría la puerta del cuarto puesto a Vettel y le permitía a Valtteri subirse al podio.

El alemán de Ferrari por su parte conseguía una buena posición final que le permite no salir con incluso peor sensación de una carrera que debió haber sido para Ferrari, mientras que Grosjean terminaba por delante de su compatriota, Esteban Ocon y del compañero de este en la nueva Force India, Sergio Pérez, que sería octavo. Noveno, de nuevo en los puntos, Carlos Sainz Jr. que obtenía premio a su gran clasificación del sábado y que conseguía mantenerse como segundo mejor coche propulsado por Renault en un fin de semana para olvidar en el caso de los motores franceses.

Clasificación final del Gran Premio de Italia 2018: