Laura Wontrop Klauser, recientemente nombrada jefe del programa deportivo de Chevrolet, declaró que General Motors como fabricante está comprometido con la IMSA a través de Cadillac y de Corvette Racing, de allí que el programa de competición será adaptado a los nuevos requerimientos. En este caso, los planes a futuro se sustentarán en el paso del DPi al LMDh y del GTLM al GT3 con el objetivo no solamente de mantenerse en el Campeonato IMSA WeatherTech SportsCar sino también de incursionar en otras categorías de coches deportivos a nivel mundial.
Explicó que desde General Motors consideran atractivo un programa LMDh puesto que desean regresar a Le Mans en la clase principal. Si bien todavía no se ha emitido un comunicado firme en cuanto al proyecto, el departamento de competición de GM está trabajando en tal plataforma, pero primero se deben ajustar ciertos aspectos cómo lo qué se pretende hacer, buscar los socios adecuados para establecer el liderazgo y la asignación de los recursos para financiar el programa.
El compromiso con la IMSA ha resultado positivo tanto para Cadillac como para Corvette, ambas marcas comparten un mismo objetivo y por lo tanto se orientan hacia una dirección similar. Justamente se pretende una mayor relación porque han demostrado eficiencia y General Motors depende de tales iniciativas para establecer otros programas. Se trata de un enfoque inteligente en el que ambas marcas estén bien posicionadas, solamente así todo lo que ha de venir tendría sentido.
Añadió que Corvette es sinónimo de competición por tal razón General Motors necesita que su coche deportivo insignia esté en las carreras. En tal sentido, desde el año pasado está en fase de estudio un Corvette con especificaciones GT3, en el que está trabajando la empresa Pratt & Miller. Además de la factibilidad de construir la cantidad de coches requeridos, unos 20 chasis en los primeros dos años, se debe establecer un programa de soporte y asistencia técnica para los clientes. Anteriormente se intentó un programa GT3 con el Cadillac ATS-V.R en la Pirelli World Challenge, pero no se pudo vender a los potenciales clientes, lo que desean evitar en esta ocasión.
En lo que respecta al Corvette y su participación en la clase GTLM, Klauser manifestó que seguirán apoyando a pesar de la poca participación ya que más allá de los resultados, lo que quieren es adquirir una mayor experiencia en las carreras. No tiene sentido abandonar ante la ausencia de rivales puesto que no tendrían como afrontar nuevos desafíos en la clase GT. Quedará en manos de la IMSA cuál será el futuro de los GTLM, pero mientras tanto General Motor seguirá apoyando el programa de fábrica de Corvette.
Tratamos de asegurar la participación de General Motors en las carreras de coches deportivos. El hecho de que la plataforma LMDh haya sido un esfuerzo conjunto entre el ACO y la IMSA lo hace muy atractivo. Siempre hemos querido volver a Le Mans en la clase principal, tenemos algunos asuntos pendientes allí. Las carreras están en el ADN de Corvette, lo necesitamos en las pistas porque tiene sentido para nosotros – Laura Wontrop Klauser
Vía | Sportscar365
