Había sido tan largo el reguero de pistas que había dejado Subaru y Prodrive acerca de su posible asalto a la preciosa carretera rumana de Transfagarasan, que incluso las primeras informaciones oficiales al respecto se entremezclaron con la frenética acción vivida el pasado fin de semana en Goodwood. No íbamos desencaminados cuando os informamos hace unos días que Mark Higgins y el Subaru WRX STI Type RA NBR iban a intentar dejar su huella en la que para muchos es la sección de asfalto más bella del mundo.
Lo que no imaginábamos es que el proyecto entre Subaru, Prodrive y el piloto oriundo de la Isla de Man fuera precisamente el de atreverse con el recorrido completo, en torno a 624 curvas y 83 kilómetros de una orgía de adrenalina que a buen seguro nos dejará boquiabiertos cuando en el departamento de marketing de la firma de las estrellas decida que el vídeo vea la luz. No es de extrañar que ante un reto tal, Higgins tuviera que precisar de la inestimable ayuda de uno de sus copilotos, Darren Garrod.
Time Attack Romania, ese fue el título elegido por Subaru. Sin nombre, no hay proyecto, y a pesar de su simpleza, quedaba claro a qué habían decidido ir a Transfagarasan y no era precisamente a hacer turismo. La lluvia y la niebla les sorprendería y obligaría a retrasar el intento. A pesar de que el WRX STI especialmente preparado para convertirse en el sedán tres volúmenes más rápido de Nordschleife cuenta con tracción total, no es imaginable el jugársela con un recorrido montañoso tan enrevesado cuando cuentas con 600 CV de potencia, por mucho que a tu volante esté todo un experto piloto de rallyes y especialista de cine.
Los medios allí presentes confirmaron que a Higgins poco pareció importarle tal mastodóntica tarea, apenas tuvo que prepararse para afrontar más de medio centenar de kilómetros sin respiro y además utilizar la primera marcha de forma continúa debido a la presencia de numerosas horquillas. El coche también se tuvo que adaptar para ello, en este caso con una configuración más blanda respecto a la utilizada en Nordschleife, luces especificas y la sustitución del depósito de combustible por uno de mucha mayor capacidad, entonces Goodwood y el Infierno Verde parecían de repente unos retos menores comparado con este titán escarbado en la roca a base de dinamita.
Tampoco los neumáticos iban a tener una tarea sencilla. En este caso el récord no tenía referencias de otros registros, por lo que se podía incluso valorar la opción de utilizar unos neumáticos de compuesto de mojado. Sin embargo, con más de 83 kilómetros de recorrido, lo normal era encontrarse con zonas secas, algo que llevaba a que las ruedas se consumieran ante el inmisericorde empuje de los 600 CV de potencia. Finalmente el cielo dio un respiro, el camino se abrió en condiciones secas y Mark Higgins y su copiloto pudieron completar las 52 millas en 40 minutos y 58,8 segundos. El registro, sumado a las pocas imágenes que se han revelado nos dejan con esa sensación de impaciencia ante lo que puede ser un espectacular trabajo audiovisual sin precedentes.
Coming soon… 😉@subaru_usa @prodrive @DunlopLive @DirtFishRally pic.twitter.com/SlkEYvXKy5
— Mark Higgins (@Mhigginsrally) July 17, 2018
Fotos | Prodrive
Vía | Automobile Mag