El coche iba bien, lo suficiente como para optar a un resultado mayor, sin embargo, la penalización que pesaba sobre él iba a ser una losa imposible de sortear. El madrileño se mostraba visiblemente enfadado después de lo que era opción de entrar en Q3 y de haber ‘pescado’ en la extraña sesión de clasificación del Gran Premio de Austria. 15º finalmente, que se convertirá en el último cajón de parrilla para el domingo después de cambiar el motor ya durante la jornada de ayer.
Carlos Sainz Jr. no ocultaba su cabreo después de lo que era una oportunidad de oro para sumar mañana un buen puñado de puntos. El equipo con sede en Woking se ponía durante los terceros entrenamientos libres a buscar unos reglajes para la carrera, con una buena velocidad punta que les permita adelantar y se centraban especialmente en tratar de ayudar con los rebufos a un Lando Norris que sacaba un sexto puesto en parrilla muy valioso.
Nunca es fácil sacrificar una buena opción de Q3, pero con la penalización y los reglajes que llevábamos es lo que tocaba. Felicidades a Lando y al equipo por su buen rendimiento hoy. ¡Mañana volvemos a la carga!
Se plantea una jornada difícil para el español de McLaren. La penalización por utilizar su cuarto motor de combustión interna lo relega al último lugar en un circuito en el que, si bien sí hay puntos de adelantamiento, deberá recuperar posiciones en un circuito que demostró el viernes que no hay lugar para los errores. El objetivo principal será el de escalar plazas y esperar errores del resto mientras se preserva la mecánica de cara al Gran Premio de Gran Bretaña, el cual ha pasado a ser la verdadera meta.
