Desde que el ACO anunció la desaparición de la división LMP2 para el año que viene y además ralentizó a tales coches para esta temporada, por instantes se pensó que el futuro de los prototipos de segunda clase era incierto, salvo por el pronunciamiento de la IMSA que garantizó la presencia de los LMP2 en el campeonato hasta el 2025, aunque limitados en el tope de las revoluciones del motor. Tanto el ACO como la FIA realizaron ajustes técnicos para que los LMP2 no pudieran aproximarse al Hypercar más lento, de allí que la potencia del motor Gibson V8 se redujo a 536 caballos, se limitó el combustible a unos 65 litros, se aumentó el peso y se implementó un kit aerodinámico de muy baja carga.
Con tales limitaciones, era obvio que los equipos que participan en la clase LMP2 del WEC se interesaran en otras categorías debido a los improductivo que resultaba competir con un prototipo cuyo rendimiento estaba muy por debajo de sus especificaciones, solamente para complacer a los fabricantes que compiten en la clase principal, y que también estarán involucrados en la nueva división LMGT3. Pero hay una luz de esperanza para los que invierten en los LMP2 puesto que se anunció que en la European Le Mans Series podrán competir a su máxima potencia a partir de la próxima temporada, lo que no ocurría desde el año 2020.
Siendo así, los LMP2 podrán participar a pleno rendimiento, esto se traduce en que el motor V8 Gibson desarrollará más de 600 caballos en un coche cuyo peso es de 930 kilos, con un consumo de combustible optimizado. Desde que Paul di Resta logró el tiempo más rápido a una vuelta en un LMP2 en las 24 Horas de Le Mans de 2020, 3:24.528 minutos, de inmediato iniciaron las propuestas para acentuar la diferencia con respecto a la clase LMP1 ya que tal registro era tan bueno que le hubiera servido para salir entre los cuatro primeros en la parrilla. La preocupación aumentó cuando se anunció la introducción de una nueva generación LMP2, pero tal iniciativa se detuvo por varias razones, de allí que los chasis ya diseñados se destinaron a ser las bases de los LMDh que ahora están en pista.
Aunque los LMP2 podrán competir con toda libertad en la ELMS, cuando los ganadores reciban la invitación para acudir a las 24 Horas de Le Mans, nuevamente se aplicarán las restricciones técnicas para preservar la diferencia entre las clases.
Vía Motorsport Total
