Apenas unos días después de ver en Indianápolis la versión para óvalos, la IndyCar ha puesto en pista en un circuito rutero los monoplazas con motor Chevrolet y Honda que empleará la próxima temporada. Ha sido en Mid-Ohio, donde el campeonato norteamericano celebró este pasado fin de semana su última cita, lo cual permitirá comparaciones interesantes de cara a continuar con el desarrollo del nuevo kit aerodinámico.
Como ocurrió en Indianápolis y ocurrirá también en Iowa y Sebring, los otros escenarios previstos en el calendario de desarrollo del nuevo monoplaza de la IndyCar Series, Oriol Servià y Juan Pablo Montoya son los encargados de pilotar y dar feedback a Honda y Chevrolet respectivamente. Posteriormente se ofrecerá este kit aerodinámico universal a todos los equipos interesados en participar en la temporada 2018 para sus pruebas de pretemporada. Personalmente me recuerda mucho al actual monoplaza de Indy Lights, también obra de Dallara.
Hay que recordar que aunque hablemos de un kit para óvalos y otro para ruteros, no es exactamente así. Mientras que el de óvalos se reserva para trazados de tipo ‘superspeedway’ como Indianápolis o Pocono, en óvalos cortos se suele emplear el mismo paquete aerodinámico que en circuitos urbanos o ruteros al estilo europeo. Por lo tanto es probable que las diferencias entre los coches que hemos visto en Mid-Ohio y los que veamos en Iowa sean mínimas… salvo que quieran probar de cara a un futuro cambio de filosofía.
Fotos | IndyCar Series
