Adaptarse a una disciplina completamente nueva, a un estilo de conducción distinto y a la necesidad de tener a una voz a tu lado que te dice hacia dónde tienes que ir y no qué reglajes tocar para ser más rápido en un circuito. El reto que se plantea para Fernando Alonso si finalmente decide competir en el Rally Dakar es mayúsculo a la par de satisfactorio. No sería ni el primer piloto de Fórmula 1/circuitos que da el salto a la disciplina, ni tampoco será seguramente el último, pero sí que se convertiría en un antes y un después para el rally-raid organizado por ASO como ya lo fueron las participaciones de pilotos de la talla de Ari Vatanen, Jacky Ickx o el todavía en activo, Carlos Sainz.
Obviamente Alonso es de la misma opinión que Sainz al respecto de la competición. Si no tienes opciones de ganar es mejor no ir, por lo que se deja entrever de esta prueba de Fernando Alonso que está claramente interesado en comprobar las sensaciones al volante de la Toyota Hilux V8 4×4 y ver si tiene opciones de sentirse competitivo en una de las pruebas más icónicas del mundo del off-road. La implicación del equipo Toyota GAZOO Racing South Africa también demuestra que la opción tiene tintes oficiales y que hay predisposición de todas las partes, pero en el pasado ya hemos visto otras rocambolescas uniones que no se llevaron adelante como la posibilidad de que Kimi Räikkönen o Sébastien Loeb compitieran en las 24 Horas de Le Mans con Peugeot.
La apretada agenda del español es otro de los puntos más difíciles para complementar esta programación multidisciplinar. Los grandes retos de la primera mitad del año implican las 24 Horas de Le Mans y las 500 Millas de Indianápolis, lo que podría dejarle al asturiano con algo más de tiempo a partir del mes de junio. El Silk Way Rally se disputa entre los días 6 y 16 de julio, mientras que el Rallye du Maroc sigue emplazado en el mes de octubre, concretamente del 4 al 8 y con David Castera al frente de la organización. De prepararse para el Rally Dakar 2020 una de esas dos citas debería estar obligatoriamente en el calendario. El resto de eventos del calendario de la Copa del Mundo de Rallyes Cross Country se disputan antes del 1 de junio, mientras que las Bajas son carreras de apenas dos días que suelen servir más para coger velocidad.
¿Cuáles son los principales retos de Fernando Alonso?
Sabemos por experiencia que la adaptación a un tipo de competición como el off-road suele confortar un aprendizaje previo que en el caso de pilotos provenientes de circuitos suele implicar una primera fase de ‘reconfiguración’ del estilo del pilotaje. En el caso de los pilotos de Fórmula 1 esta curva de aprendizaje puede ser incluso más acusada ya que incluso cambian las referencias. Ya no se va a ras del suelo y centrado en el cockpit, sino que la posición de conducción es mucho más elevada, desplazada hacia la izquierda y además la visión ya no solo se centra en lo que está inmediatamente delante, sino que además se deben advertir otros peligros, buscar otras trazadas óptimas en el mar de dunas o estar atentos al resto de participantes.
Físicamente a buen seguro está preparado para afrontar un cambio de disciplina, especialmente con su ritmo de entrenos y de competición, por lo que no parece que sea difícil el entrar en la dinámica de trabajo de una carrera de dos semanas. Su experiencia en rallyes sí es mucho más limitada a pesar de la buena relación que mantiene con nombres como Carlos Sainz Sr. o el propio Cohete Suárez, piloto con el que suele entrenar en karting. Más allá de algunas pruebas de un coche de rallyes y un kartcross en la finca de la familia Sainz o con un prototipo de las G-Series, el ovetense no cuenta con un gran bagaje fuera del asfalto, por lo que tendría que trabajar sobre superficies clave como la arena y los caminos de grava.
En una disciplina en la que las diferencias se miden en minutos y ya no en horas después del ritmo de evolución mantenido durante la última década, ya pudimos comprobar que una estrategia conservadora y sin brechas tiene que estar acompañada de velocidad para vencer a grandes expertos como Nasser Al-Attiyah, Stéphane Peterhansel, Nani Roma, Cyril Despres, Giniel de Villiers o el propio Carlos Sainz. No vale con nadar y guardar la ropa esperando el error de los demás, hay que correr y mucho, tanto en terrenos de pista dura como en las dunas y superficies muy cortadas en las que tanto 4×4 como los buggies han demostrado que con los años se han convertido en auténticas máquinas de velocidad.
La navegación es otro de los grandes elementos a tener en cuenta. Obviamente, si decide lanzarse a la aventura y tratar de pelear por el touareg dorado, Toyota GAZOO Racing encontrará un navegador/copiloto con gran experiencia en estas lides que se pueda complementar a la perfección con el bicampeón Mundial de Fórmula 1. Peugeot quiso que Loeb hiciera lo mismo, Sainz contó con Andy Schulz para el debut del madrileño en el Dakar y son otros muchos los ejemplos de copilotos experimentados por los que se han optado en caso de decidirse a debutar en los rally-raid.
A pesar de ello, el mercado suele ser bastante limitado y aunque vemos apuestas como la de Cyril Despres y X-Raid por Dani Oliveras, vemos una tendencia a contar con los nombres habituales en los equipos oficiales. El lenguaje no será una barrera, así que se puede mirar también fuera de nuestras fronteras. Su participación con United Autosports, Andretti, Toyota o Wayne Taylor Racing no deja duda de la capacidad de amoldarse a los distintos grupos humanos, pero necesariamente sí tendrá que cambiar por completo su forma de pilotar al no poder reaprovechar casi nada de su actual estilo de circuitos.
La toma de contacto en Bokhara con Giniel De Villiers y su navegante, Dennis Murphy, como profesores particulares será una buena forma de evaluar las sensaciones que despiertan en Alonso esta competición. La unidad elegida contaba con las protecciones laterales para árboles y los dorsales que se emplean en el campeonato sudafricano de Rallyes Cross-Country, por lo que parece que será la misma que empleará Giniel esta temporada. En la mente del piloto español sigue estando el convertirse en uno de los mejores pilotos de la historia y eso no pasa por acumular títulos mundiales de Fórmula 1, sino que su criterio es el de ser uno de los más completos. Los rally-raids sin duda serían una buena forma de demostrar lo polivalente que es detrás de un volante de competición, sin importar si este está a metro y medio del suelo o a solo unos centímetros.