La temporada 2021 de M-Sport Ford WRT puede ser una larga travesía en el desierto. El equipo con sede en Cumbria reconocía que estaban dispuestos a arriesgar en pruebas como el Rallye Monte-Carlo en busca de un buen resultado, sin embargo, el músculo económico que actualmente poseen los de Malcolm Wilson está focalizado en estos momentos a dos áreas principales: el desarrollo del Rally1 para el próximo año y los trabajos que se realizan en las instalaciones de la estructura con el objetivo de convertirlas en una de las grandes referencias de la industria automotriz, un gran heredero de la icónica Boreham.
Con todo ello, no es la primera vez que se pone en duda la posible continuidad de M-Sport debido a las dificultades económicas de un equipo que, al igual que otras empresas británicas no sólo se está viendo afectada por el coronavirus, sino que también el Brexit les está obligando a afrontar ciertas decisiones inesperadas. A pesar de ello, el equipo respira en parte aliviado debido al apoyo que se le está dando desde Ford, el cual parece que ha avanzado respecto a su anterior asociación técnica.
Según Richard Millener, el equipo no está empleando fondos que en principio iban a estar destinados para esta temporada en el desarrollo del Rally1 híbrido enchufable de la próxima campaña. El responsable del equipo ha confirmado que el montante de esa primera temporada con los nuevos coches ya se encuentra asegurado y es independiente del de 2021. Él mismo ha reconocido aun así que se está operando con menos personal del habitual.
Tenemos mucha suerte y Ford nos ha prometido un presupuesto completo, que hemos reservado para el programa. Ahora tenemos que encontrar una nueva dirección para la empresa haciendo posible operar con menos personal y controlando estrictamente los gastos y los costos. También nos equilibramos para ser lo más competitivos posible. Está claro que será difícil competir con nuestros rivales en nuestro sistema actual y luchar de la forma más competitiva posible, pero estamos satisfechos con nuestro equilibrio actual – Richard Millener
Queda por confirmar si el Ford Fiesta seguirá siendo el automóvil que se utilizará como base para el programa o si tras una década dejará lugar a un nuevo modelo. Debemos recordar que con la nueva normativa los equipos se encuentran trabajando en chasis tubulares, sobre los que se establecerá una silueta con las formas del vehículo de producción, el cual puede incluso pertenecer al segmento de los SUV compactos, con un reescalado que le permitiría cumplir con las dimensiones actuales.
Con la promesa de la llegada de un Ford Puma ST a la comercialización, queda por ver si este apoyo de la firma del óvalo significará también un cambio de carcasa a un modelo más actual. Aunque algunos medios han sugerido sobre la opción de cambiar el exterior dependiendo del país en el que se compita, esta opción parece muy complicada a tenor de los trabajos aerodinámicos específicos que requieren estos coches.
Vía | Motorsport News (Edición impresa)
