Aunque se espera que Yoann Bonato sea el encargado de pilotar el Citroën C3 R5 en el estreno de WRC2 Pro en el Rallye Monte-Carlo 2019 (Gus Greensmith hará lo propio con el Ford Fiesta R5 de M-Sport Ford WRT), permanece la incertidumbre de ver qué ocurrirá en el resto de citas y si tendremos alguna unidad más desplazada a las distintas citas del Mundial de Rallyes. No ha habido confirmación oficial acerca de su futuro, sin embargo, Stéphane Lefebvre publicó a finales de 2018 un mensaje en sus redes sociales que dejaba entrever que el año que viene lo veremos también al volante de una de las unidades de los de Versalles, faltando por saber si será bajo los colores de la estructura oficial en el WRC o si lo veremos regresar a los orígenes en el Nacional galo.
Además de la posibilidad de que Lefebvre continúe, un nuevo nombre ha surgido durante las últimas horas en relación al equipo que Citroën Racing inscribirá en WRC2 Pro para este 2019. Con Volkswagen monopolizando las noticias durante las últimas semanas en materia de R5 y con las futuras llegadas de los nuevos Ford Fiesta R5 y Skoda Fabia R5, la firma de los dos chevrones se ve en la necesidad de seguir alineando su carreras-cliente para que el nivel de ventas no caiga.
Es en este punto donde ha surgido la posibilidad de que Mads Ostberg mantenga su relación con Citroën Racing una temporada más. Según el medio noruego Parc Fermé, el piloto cuenta con las opciones de competir al volante de un Volkswagen Polo GTI R5 o en un C3 R5 en un proyecto que debería anunciarse la próxima semana. Experiencia para tratar de contrarrestar las prestaciones de sus rivales, especialmente después de que en 2018 solo se haya podido sumar tres podios en WRC2 en ocho rallyes disputados. Por su parte, Bonato se coronó Campeón Nacional francés después de ganar cuatro pruebas, mientras que Lefebvre tuvo que esperar a la última cita del Campeonato Belga para conseguir su primer triunfo con la unida de MY Racing.
En el caso de concretarse la opción de Ostberg, estamos hablando de un piloto que ha disputado en 2016 y 2017 numerosas citas al volante de distintos R5, y que incluso llegó a tontear con la participación en WRC2 después de una temporada llena de vaivenes que comenzó con su acuerdo con la estructura de Martin Prokop y que terminó pilotando una unidad del Ford Fiesta WRC alquilada a M-Sport.