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Max Verstappen aprovecha el infortunio de Charles Leclerc en Mónaco y se pone líder del Mundial, primer podio de Carlos Sainz con Ferrari

Primer golpe de efecto al Mundial de Fórmula 1 en el ansiado regreso a Mónaco: Max Verstappen ha ganado el Gran Premio en el Principado en una demostración de dominio que le sirve para ser líder del campeonato ante un día nefasto de Lewis Hamilton. El piloto de Mercedes acabó séptimo y no pudo en ningún momento adelantar a Pierre Gasly en las estrechas calles, tierra de origen de un Charles Leclerc desafortunado de nuevo en casa. Carlos Sainz salvó los muebles rojos con su tercer podio en F1 y Lando Norris acompañó al español y al holandés en el cajón.

Leclerc logró la pole position el sábado pero no pudo tomar la salida al intentar partir sin tocar la caja de cambios, hecho que Ferrari consideró irreparable tras dar la vuelta de instalación y le dejó fuera de carrera. El hueco de la pole quedó vacío y Verstappen salió primero desde la segunda posición, cerrando el hueco a un agresivo Valtteri Bottas en los primeros metros. Ambos se fugaron de Sainz, Norris, Gasly y Hamilton, encargados de dar emoción a la lucha por el podio. Sebastian Vettel era séptimo y mantuvo su lugar con éxito respecto a Sergio Pérez cerrando un top 10 sin cambios Antonio Giovinazzi y Esteban Ocon.

Norris se apuntó la vuelta rápida aunque las grandes distancias entre coches no permitían apenas peleas por posición directa en pista después de diez vueltas; solo Yuki Tsunoda iba cerca de la dupla de Williams en busca del 15º puesto. Lance Stroll y Kimi Räikkönen habían partido mejor que Daniel Ricciardo, acosado por un veloz  Fernando Alonso que superó a Tsunoda y a George Russell. La nota entretenida vino por parte de Norris y de Nikita Mazepin, increíblemente advertidos por exceder los límites de la pista en un trazado urbano.

Verstappen empezó a escaparse poco a poco de Bottas, a su vez presionado por un constante Sainz que fue a por el Mercedes a medida que los neumáticos iban perdiendo su eficacia. Hamilton y Ocon tenían gomas blandas un poco más frescas que sus rivales e intentaron mantenerse cerca de Gasly y Giovinazzi respectivamente, antes de buscar undercuts en las paradas obligatorias. Sin mayores movimientos en las primeras 30 vueltas, los equipos se encomendaban al paso por el pit lane para avanzar posiciones frente a la competencia.

Fue Hamilton el primero en ir a boxes en la vuelta 29 y puso neumáticos duros para llegar hasta el final de la carrera, cubriendo Gasly su lugar con el heptacampeón por poco. Bottas y Norris también pararon y el finlandés no pudo salir de nuevo al fallar la pistola neumática de la rueda delantera derecha, abandonando y dando más tranquilidad a Verstappen. Vettel paró tras 32 giros y salió en paralelo con Gasly en la subida al Casino, situándose por delante del francés y de Hamilton. Nadie se fiaba y todos los coches equipaban ruedas duras para ir con calma.

Giovinazzi y Verstappen entraron en la vuelta 34 y el holandés salió por detrás de Pérez, que alargó su detención un giro más y pasó de octavo a cuarto superando a Vettel, Gasly y un desesperado Hamilton. Ricciardo y Ocon fueron a boxes a mitad de Gran Premio, saliendo el australiano poco por delante de los Williams y ganando el galo un lugar con Giovinazzi a pesar de cambiar ruedas cuatro vueltas más tarde que el italiano. Stroll (duros) y Räikkönen y Alonso (ambos con medios) alargaban sus pasos por boxes en busca de mejores gomas en la segunda mitad de carrera.

Räikkönen entró en boxes en la vuelta 44 y salió 12º justo enfrente de Ricciardo, siendo ambos doblados por Verstappen y Sainz poco después. Alpine intentó cambiar la estrategia de gomas, poniendo medias a Ocon frente al empuje de Giovinazzi y blandas a Alonso cuando el asturiano paró en la vuelta 46. Ocon empezó a taponar a Giovinazzi y sus esfuerzos beneficiaban a un tranquilo Stroll que seguía tomando distancia a la espera de su parada.

Verstappen y Sainz era mucho más rápidos y constantes que los demás pilotos y estaban separados por tres segundos en una lucha de tensión por la victoria. Norris dobló a su compañero Ricciardo y Pérez se llevaba la vuelta rápida detrás del de McLaren, cómodo tercero en la hora de la verdad. Stroll y Tsunoda eran los únicos que no habían cambiado gomas a falta de 20 vueltas: el canadiense entró la 58 y salió muy por delante de Ocon y Giovinazzi, mientras que el japonés siguió hasta la 65 y quedó tras la dupla de Williams.

Pérez tenía ruedas duras cinco giros más nuevas que Norris y empezó a recortar la distancia con el inglés, que pasó de unos siete segundos a uno y medio en las últimas 15 vueltas. Al mismo tiempo, el tapón de Ocon a Giovinazzi con medias gastadas hacía que Räikkönen, Ricciardo y Alonso les alcanzasen en la pelea por los últimos puntos, siempre valiosos en la zona media de la parrilla. Tsunoda marcó la vuelta rápida y Mercedes hizo entrar una segunda vez a Hamilton en busca del punto extra al no poder combatir con Vettel y Gasly.

Verstappen venció con cierto margen sobre Sainz y Norris, sumando el español su primer podio de rojo y resistiendo el de McLaren la cercanía de un Pérez que salvó los muebles (de 9º a 4º). Vettel finalizó quinto, un gran resultado en los primeros puntos de la temporada del alemán, seguido por Gasly, Hamilton (que consiguió la vuelta rápida) y el doblado Stroll. Ocon y Giovinazzi cerraron la zona de puntos, con Räikkönen, Ricciardo y Alonso pegados. Russell, Nicholas Latifi y Tsunoda llegaron a meta, con los Haas de Mazepin y Mick Schumacher a tres vueltas y las imprevistas retiradas de Bottas y Leclerc como cierre de la clasificación.

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Héctor Sagués

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