Última sesión de entrenamientos libres por las calles del Principado de Mónaco antes de la disputa de la sesión de clasificación a las cuatro de la tarde y se ha mantenido por el momento la igualdad, con la presencia también de Checo Pérez que hasta el momento se había mantenido al margen. El mexicano estuvo durante buena parte de la sesión con el segundo mejor tiempo de la tabla, en este caso a 72 milésimas del tiempo que había marcado Max Verstappen, un crono de 1:12.776 que prácticamente estaría vigente durante más de la mitad de la FP3 de este Gran Premio de Mónaco.
Fue una última sesión en la que todos los pilotos eran conscientes de que un error puede llevarte contra el muro y dejarte sin sesión de clasificación en caso de que los mecánicos no sean capaces de tener a tiempo el monoplaza. Sin embargo, también era el momento de encontrar los límites, algo que se pudo comprobar con el hecho de que Max Verstappen y Charles Leclerc (curva 1 y 14 respectivamente) rozaran los muros o que el propio Carlos Sainz tuviera un momento a dos ruedas en la curva del Casino.
Quizás el momento de más apuro se vivió cuando el Alpine le dejó momentáneamente tirado a Esteban Ocon en la entrada del túnel, quedándose el piloto francés detenido justo antes de la curva mientras sus frenos humeaban y el monoplaza parecía tener problemas de potencia. Afortunadamente no hubo ningún tipo de impacto por alcance y el coche pudo salir de esa posición de apuro para regresar a boxes con Ocon pidiendo al equipo que tuvieran los extintores preparados.
A partir de ahí, la segunda mitad de esta hora que tienen disponibles los pilotos en la mañana del sábado nos dejaron otro toque contra las barreras, en este caso por parte de George Russell que, aparentemente, no dañó nada, mientras que Leclerc se quejaba por radio de que el coche tocaba mucho con el suelo en el asfalto, algo que le obligaba a levantar el pie en la S previa a la zona de la piscina donde tuvo ayer el accidente su compañero de equipo, Carlos Sainz.
Mucho trabajo en boxes para encarar el que sería el último cuarto de hora de entrenamientos libres, con los pilotos de Red Bull Racing y el propio Fernando Alonso encontrando esos últimos ajustes de equilibrio con cambios en la barra de torsión y en las caídas de los neumáticos traseros. Como siempre suele ocurrir en estos casos, una bandera amarilla o un monoplaza parado en pista suele deparar que todos los intentos de vuelta rápida se vean prácticamente alterados.
En este caso sería Kevin Magnussen el protagonista doble en apenas unos minutos, primero pasándose de frenada en Sainte Devote y después de muchos minutos tratando de salir de dicha escapatoria, su HAAS se quedaba detenido en la bajada de Portier para encarar el túnel, seguramente por un problema de sobrecalentamiento derivado de ese tiempo que había estado intentando regresar al circuito.
Justo en el momento en el que se retiraba el VSC provocado por Magnussen, Lewis Hamilton se iba al muro después de tratar de corregir un sobreviraje que le hacía su nuevo Mercedes en Mirabeu. Bandera roja a falta de cuatro minutos para el final, con el británico consiguiendo mejor tiempo en el primer sector, mientras que Lance Stroll y Checo Pérez se repartían los dos restantes. Aun así, al igual que ayer, Max Verstappen se hacía con el mejor crono después de ser el piloto más regular en la suma de todo el circuito.
Lance Stroll se colaba por delante del Ferrari de Carlos Sainz, cuarto, y justo por detrás de los dos Red Bull, mientras que Lanco Norris y Pierre Gasly lograban también mejorar el crono del local, Charles Leclerc para terminar quinto y sexto respectivamente, mientras que Fernando Alonso no pudo terminar los libres entre los 10 primeros.
Clasificación FP3 – Gran Premio de Mónaco:
