La lluvia ha sido la incomoda compañera de viaje en esta última sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de España antes de la disputa esta tarde de la clasificación. Apenas aguantarían las precipitaciones una decena de minutos, lo justo para que los pilotos salieran a quemar el primer juego de seco y ver cómo había evolucionado el asfalto con el paso de las categorías soporte. El primer rayo que se veía en el horizonte anunciaba ‘reseteo’ del alquitrán y un buen rato parados en el box a la espera de evolución. Las circunstancias serían incluso peores.
Fue el accidente de Logan Sargeant el que propició que prácticamente nadie sacara provecho de los primeros minutos de la última sesión de entrenamientos libres. El estadounidense buscó los límites en la curva de entrada a meta… y los encontró. El Williams le hizo un extraño que el norteamericano fue capaz de controlar, pero no de subsanar por completo, yéndose a la escapatoria de grava y terminando por golpear contra las protecciones.
Bandera roja y casi un tercio de sesión que se difuminaba mientras que los monoplazas esperaban en el box a la espera de ver cómo evolucionaba la meteorología. Con un juego extra de intermedios que se daba a todos los equipos, ninguno quería malgastar las gomas disponibles a la espera de conocer cómo se iba a comportar el tiempo durante el resto del fin de semana. Apenas Lando Norris saldría a pista cuando quedaban 28 minutos para poder comprobar el estado de agarre especialmente de los pianos.
Una vuelta a baja velocidad y el británico regresaba al box con los intermedios montados para también sumarse a esa espera en la que ya estaban todos los competidores. El crono siguió descontando minutos hasta que cuando ya figuraba veinte minutos para el término de la FP3, los dos Ferrari salieron y desencadenaron que otros equipos se animaran, todos con intermedio ya que la lluvia seguía sin cesar y las previsiones apuntan a que en clasificación también será compañera.
Tocaba encontrar poco a poco sensaciones en estas condiciones cambiantes, hasta el punto de que incluso llegamos a ver a algún piloto visitar las escapatorias como era el caso de un Lance Stroll que se iba hasta la grava. El canadiense era inmediatamente llamado a boxes, algo que él no entendería hasta que el equipo le respondió que era necesario para comprobar el estado del monoplaza. También Pierre Gasly en la subida a la Moreneta encontraría el exterior sin mayores dramas en materia de daños del monoplaza.
Cuando ya el reloj descontaba los últimos minutos, los últimos pilotos que se encontraban rodando aprovechaban ya para montar el blando y salir a comprobar el agarre del carril seco. Pocas conclusiones para sacar, incluso para Max Verstappen, autor del mejor tiempo con un deslumbrante 1:13.664 que conseguiría antes de la aparición de la lluvia, seguido en este caso por un Checo Pérez que también conseguía meterse en los trece, mientras que los outsiders de ayer se eliminaban y Lewis Hamilton se quedaba con la tercera posición, seguido por los dos españoles, Carlos Sainz y Fernando Alonso, así como George Russell y Charles Leclerc.
Especialmente clara fue la comunicación realizada por parte de un Verstappen que no se encontraba nada cómodo con empujar en las condiciones en las que terminaba la sesión, advirtiéndole su ingeniero de pista que todos lo estaban intentado, a lo que contestaría airadamente el neerlandés que no le importaba lo que hacían los demás. Prácticamente nadie entre los primeros equipos quiere que llueva, en el caso de Red Bull por la superioridad, en el caso de Fernando Alonso y Aston Martin porque están más cómodos en seco y conociendo a la perfección el rendimiento del coche, mientras que en Mercedes y Ferrari quieren realmente valorar las nuevas mejoras introducidas.
Clasificación FP3 – Gran Premio de España 2023:
