Tras diez años juntos, es decir desde que el piloto holandés competía en la Fórmula 3, la cadena de supermercados Jumbo anunció que pondrá fin a la relación de patrocinio con Max Verstappen al término de esta temporada. También la empresa informó que dejará de apoyar al Gran Premio de Holanda, lo que significa un tropiezo para la organización del evento. Tal decisión obedece a las acusaciones legales que se han realizado contra Fritz van Eerd, quien además de ser el propietario de Jumbo también se desempeñó como piloto en categorías de resistencia, el cual está siendo procesado por lavado de dinero.
Al iniciar las investigaciones judiciales, el patrocinio deportivo de Jumbo fue eliminado principalmente del equipo Racing Team Nederland, donde Fritz van Eerd compartió la cabina del LMP2 con Jan Lammers, Nyck de Vries, Job van Uitert y Giedo van der Garde. Sin embargo, en lo que respecta al apoyo a Verstappen, el respaldo se mantuvo puesto que era el de mayor impacto mediático y por lo tanto garantizaba la presencia de la marca en la élite del deporte. Según explicó Ton van Veen, actual encargado de Jumbo, la empresa ahora necesita alejarse de gastos de patrocinio, así que todos serán eliminados desde el más importante, como el respaldo a Verstappen, hasta el más pequeño que es el aporte que realizaban al equipo ciclista Jumbo-Visma.
Explicó van Veen que el problema no es la inversión por concepto de patrocinio en el deporte sino que justamente ese punto es el centro de la investigación judicial y en los contratos relacionados con el deporte motor radican los mayores movimientos de dinero. Este retiro de patrocinio, sobre todo a Verstappen, no significa que dejó de ser rentable porque sin duda lograron notoriedad a nivel mundial, pero por razones éticas deben apartarse y dejar que las investigaciones sigan su curso.
En palabras de Ton van Veen:
Max [Verstappen] es, por supuesto, un héroe popular, pero actúa en el escenario mundial absoluto. Somos un muy buen distribuidor de alimentos, pero solo en los Países Bajos y un poco en Bélgica. Invertimos más de 20 millones de euros al año en patrocinio deportivo, pero solo podemos gastar cada euro una vez. No podemos devolver el dinero que va a Max a nuestros clientes, ni invertirlo en sostenibilidad o salud.
Vía De Telegraaf
